El gobierno de Puebla convenció a los ejidatarios de Tlahuapan de reabrir la autopista México-Puebla después de más de 57 horas de bloqueo ininterrumpido en ambos sentidos, obligando a los automovilistas a quedarse varados o buscar rutas alternas.
La vialidad apenas tendrá un carril abierto para que los automovilistas circulen sin restricciones, el segundo tendrá bloqueos intermitentes y el tercero, identificado como lateral, se mantendrá cerrado por los tlahuapenses.