Un día después de la marcha por el 8 de marzo, las pintas y consignas que mujeres escribieron en los negocios y edificios públicos, como el Congreso de Nuevo León y el Poder Judicial, fueron retirados por completo.
Sobre la calle Zaragoza, en el centro de Monterrey, quedaron las huellas de la manifestación, pero trabajadores de Servicios Públicos, Simeprode y de otras dependencias comenzaron a restaurar los espacios.
En los grafitis se pueden leer nombres de presuntos responsables de algún delito, exigencias de los colectivos y nombres de víctimas que no han tenido justicia.
Otro de los inmuebles dañados fue el Palacio de Gobierno de Nuevo León, que este jueves amaneció con los cristales rotos y las puertas quemadas.
La Catedral de Monterrey también terminó con pintas en las paredes, pero personal aplicó pintura para cubrir los mensajes de las bardas.
Se contempla que este mismo jueves queden limpias las zonas por donde pasó la marcha.
Ayer, más de 30 mil mujeres se dieron cita a la Explanada de los Héroes para alzar la voz en el marco del 8M por el Día Internacional de la Mujer.
Durante algunos instantes todo fue caos, pues las banquetas estaban llenas de vidrios, personas corriendo, policías de Fuerza Civil intentando hacer un cerco en el sitio, y de pronto todo se puso en pausa, había una niña perdida.
Gerardo Palacios Pámanes, secretario de Seguridad Pública estatal, confirmó que 16 personas fueron detenidas por agresión a los elementos policiales y daños materiales.
dat