La Universidad Autónoma de Puebla (UAP) alcanzó la política de generación cero deposición de residuos que se destinan a los rellenos sanitarios de la entidad y, con ello, no se emiten gases de efecto invernadero.
De acuerdo con la Coordinación de Gestión Ambiental, de la Coordinación General de Desarrollo Sustentable de la máxima casa de estudios, al dejar de generar residuos sólidos que llegan a los rellenos sanitarios, se dejan de emitir gases como el metano, (CH4), el cual se estima tiene 80 veces más poder que el dióxido de carbono (CO₂) para calentar el planeta.
Actualmente, en el territorio poblano, alrededor de 22 por ciento del gas que provoca el efecto invernadero proviene de la descomposición de la basura que se encuentra en los rellenos sanitarios.
Con el programa institucional de Manejo Integral de Residuos (MIRU) de la UAP que comenzó hace siete años, se logró la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y con ello se impacta de forma positiva en el cambio climático.
Diego Ariel Riva, coordinador de Gestión Ambiental en la máxima casa de estudios del estado, explicó que desde antes de la pandemia de la covid-19 y el periodo de confinamiento, la UAP dejó de generar residuos sólidos.
Comentó que se detectó que, con las actividades presenciales de más de 120 mil universitarios, se contabilizaron cerca de 12 toneladas de basura por día, ya que se generan entre 150 y 200 gramos al día de residuos, por persona.
“Del total de residuos, casi la mitad está en Ciudad Universitaria (CU) y representa de 150 a 200 gramos de residuos por persona dentro de las instalaciones, es decir, cerca de 12 toneladas por día. Los rellenos sanitarios están al límite, pero sobre todo, los residuos que se vierten producen gas metano, el cual, junto al dióxido de carbono (CO₂), causa el efecto invernadero tan dañino a la atmósfera. La universidad trabaja desde hace algunos años en reducir, reutilizar y reciclar lo que se genera a través de la recolección y disposición diferenciada con un servicio especial que brinda la empresa Green Carson, experta en el manejo de residuos”, comentó.
Señaló que la UAP está dando un paso más en las políticas de cuidado al medio ambiente al aprovechar aquellos residuos que no eran reciclables para convertirlos en fuentes energéticas, evitando así que lleguen al relleno sanitario y generen más contaminación.
Actualmente, 30 por ciento del total de los residuos que se generan en la universidad no son valorizables porque se trata de papeles de baño, cierto tipo de plásticos o materiales que no se pueden reciclar, entonces todo ese material se disponía al relleno sanitario, pero ahora son destinados como insumo para procesos productivos de empresas certificadas que les dan un aprovechamiento energético adecuado.
“Lo que sucede es que, si separamos y vendemos a cualquiera, se corre el riesgo de que este residuo se utilice o se venda; por ejemplo, para la quema de hornos de ladrillo, lo que genera una fuerte contaminación, es decir, sería contraproducente, es por eso que nosotros sólo lo canalizamos a empresas que cuenten con certificaciones”, comentó.
Detalló que la UAP cuenta con convenios establecidos con empresas capacitadas en el manejo de residuos; además, se realizan campañas que dan un valor a los materiales que se desechan y separan como cartón, papel, PET, entre otros, con el fin de generar recursos económicos que se emplean en causas sociales.
CHM