El próximo 14 de agosto, durante la celebración de “La Noche que Nadie Duerme”, donde se festeja a la Virgen de la Caridad, pobladores del municipio de Huamantla, Tlaxcala, tratarán de implantar un récord con la elaboración del tapete de aserrín más largo del mundo.
Su propósito es manufacturar un tapete de siete kilómetros de largo y, para ello, más de 2 mil pobladores voluntarios trabajarán para cumplir con esta misión, que les permitiría ingresar a los Guinness World Records.
Para lograrlo, anunciaron que usarán más de 80 mil kilos de arena y aserrín, el cual es previamente pintado de colores; así como 70 mil piezas de flores, principalmente Dalias, pues Tlaxcala es el mayor productor de esta flor en el país.
Si este Pueblo Mágico llega a romper el récord, como se lo propone, estarían desplazando de este logro a Guatemala, donde crearon un tapete de más de 2 mil metros de longitud.
Al respecto, la secretaria de Turismo de Tlaxcala, Josefina Rodríguez Zamora, explicó que esta iniciativa tiene como fin el dar a conocer a nivel mundial la tradición del tapete de aserrín, en la que se logran más de seis kilómetros de arte lineal año con año.
Adelantó que en esta ocasión los voluntarios adornarán las calles de la ciudad de Huamantla, el atrio de la Basílica de Nuestra Señora de la Caridad y crearán algunas representaciones religiosas a base de aserrín teñido de colores con diversas flores y arenas.
Recordó que después de dos años sin celebrar esta fiesta debido a la pandemia, este año regresa “La Noche que Nadie Duerme”, y esta vez con la intención de romper un Récord Guinness.
Cabe recordar que esta celebración religiosa data desde el siglo XIX, cuando los monjes franciscanos llegaron con la imagen al ahora Pueblo Mágico. Fue a partir de ese momento que empezaron a brindar comida a los pobladores de la localidad en honor a la Virgen de la Asunción.
Esto generó que tanto religiosos como creyentes le cambiaran el nombre, reconociéndose entonces como Virgen de la Caridad.
En honor a esta imagen se realiza una procesión y se tapizan las principales calles de esa ciudad con vistosos tapetes creados a mano con aserrín, que es previamente pintado de colores; tierras policromadas, flores naturales, hoja de maíz, semillas, pétalos de flores y frutas de temporada.
Estas creaciones muestran imágenes con motivos religiosos, desde santos, pasajes bíblicos, hasta la misma virgen. En estos tapetes se combinan también formas geométricas y figuras representativas de flores y aves, entre otros.
La elaboración de estos tapetes se le llama arte efímero debido a que dura solo unas cuantas horas, mientras pasa la procesión.
A todo este cortejo se le conoce como “La Noche que Nadie Duerme”, un espectáculo que dura más de doce horas en las que trabajan artesanos de la localidad. Además de los tapetes, esta fiesta se destaca por sus cantos, pirotecnia y bailes típicos de la región.
Las calles de Huamantla son cerradas a la circulación y en ellas también se colocan floreros, lámparas, festones de colores y arcos que adornan la procesión presidida por la imagen de la patrona en su carro alegórico.
CHM