Con destapes y aventados van llenando los panteones, unos andan de inventados y se creen ya vencedores. Los lectores ya revisan que les cumplan las promesas o catrinas cobrarán una a una sus ofensas. Estas son las calaveritas de la plataforma MILENIO-Multimedios.
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Samuel García
No hay naranjas que se apunten
pa’ reemplazar a Samuel.
Buscaba ir por la grande,
pero acabaron con él.
Quería permiso de gira
nomás de Mariana y Mariel,
el Congreso lo tenía en mira
y le pusieron cascabel.
Sin agua el estado está,
carretera hay pendiente,
pero él dice volverá,
no ha llegado su suplente.
No verá Tesla ni Metro,
al camposanto fue a dar.
MC lo quería adentro
y la Presidencia ganar.
Mariana Rodríguez
De Marianis ya no hablaron,
quesque se iba pa’l Senado.
De Capullos la sacaron,
el escaño había ganado.
Por destape anticipado
la iba el INE a sancionar;
con bandera fosfo fosfo
el triunfo quiso asegurar.
Samuelón de avorazado
fue el que al ruedo la aventó,
olvidó hasta el doctorado
y a la muerte la entregó.
Dante y Clemente lloran…
el camino duro está.
Chavacana, ellos te añoran,
el Movimiento perderá.
Arturo Salinas
Con Arturo aseguraron
que al Palacio no llegaba,
los amparos lo cansaron
y la muerte lo cazaba.
La calaca pronta y rauda
a Salinas se llevó;
ahora tiene quién aplauda,
pues Navarro agradeció.
“La manzana envenenada”,
lo llamó un conversador,
hoy su muerte está vengada,
pero no hay gobernador.
Ya las patas le jaló
a todito el Gabinete;
de Palacio se salvó
Iván Rivas y su gente.
Javier Navarro
El flamante secretario
con las ganas se quedó,
quería ser el mandatario
y la huesuda lo cargó.
¡Ay, Navarro de mi vida!,
de mirada despistada,
tú le diste una mordida
a la manzana envenenada.
Le gustaba lo llamaran
desde ya gobernador,
las calacas lo alcanzaban,
lo acusaban de traidor.
Y aunque amparos presentó,
a la muerte le dio gracia,
todititos los negó,
porque odia la burocracia.
Luis Donaldo Colosio
A Colosio se llevó
por el caos que hay en Madero,
la Catrina no aguantó
tanta obra del heredero.
Luis Donaldo reclamó
con ahínco a la Catrina
que en encuestas empató:
“Ya es mi turno, chiquitina”.
Que sonaba pa’l Senado
o volver a la alcaldía,
pero estaba concentrado
en salvarse de la fría.
Baile y baile se escapó,
se fue por Constitución.
la calaca lo alcanzó…
y no hay nuevo Nuevo León.
Abraham Vargas
Qué desastre hay en el Metro,
ninguna línea funciona,
Abraham Vargas es espectro
por no orarle a la patrona.
Se olvidó que la calaca
le ordenó no fuera a China,
no contaba que la flaca
era necia y cantarina.
Por pelearse con la prensa
la calaca lo llamó,
tenía una relación tensa,
la paciencia le colmó.
La calaca arremetió
por toditos los usuarios,
él nomás palideció,
lo pasó a los obituarios.
Juan Ignacio Barragán
Juan Ignacio le imploraba
el perdón a la Catrina,
que la presa le llenaba
y que no fuera cansina.
“Juan Ignacio, ya no ruegues,
que mentir no se te da,
y aunque a Tláloc tú le juegues,
sin agua se quedará”.
Con sacarlo amenazaban
por tener un chaperón,
desde casa le cantaban:
“lo mandó Federación”.
Al panteón se lo cargó,
cual ofrenda suculenta
que con agua le pagó
pa’ que llenen la cubeta.
Alma Rosa Marroquín
¿Dónde andará Marroquín?,
la huesuda la buscaba,
a los niños del jardín
la secretaria vacunaba.
De pasearse en los lactarios
la acusaba la Catrina,
que mejor se fuera a barrios,
le pedía la flaca y fina.
“Ven, muchacha del demonio,
que el covid se terminó,
ya no tienes testimonio,
ya tu vida se acabó”.
Sin embargo, la huesuda
de seguirla se cansó,
que dejara de ser ruda
y de un brazo la cargó.
Miguel Treviño
La calaca lista va
pa’ limpiar ya la corona,
de Miguel muy harta está,
no le aguanta ni la broma.
Sus opciones son variadas,
pa’ San Pedro gobernar,
son las sedes más preciadas,
no los quiere condenar.
“Miguelito, ya no inventes,
ni me intentes convencer,
porque ni partido tienes
pa’ que puedas contender”.
Pa’l Senado no alcanzó,
a la parca le mandaron,
MC lo cepilló,
de la terna lo sacaron.
Martha Herrera
¡Ay, Martita tan cansona!,
le gritaba ya la muerte,
por andar dona que dona
la calaca fue incluyente.
Los migrantes te lloraron,
nadie viene a procurarlos,
del Gobierno ellos se fiaron,
ya no estás tú pa’ ayudarlos.
De candidata soñaba
con brillar el veinticuatro,
a la IP no rezongaba
y no hacía mucho teatro.
Te espera ya la Nueva Ruta,
pero aquí no hay inclusión,
la calaca es muy astuta
y te lleva pa’l panteón.
Pedro Arce
Sin tener el nombramiento
Pedro Arce se quedó,
sin hacerle mucho aspaviento
la huesuda lo acabó.
“Pedro Arce, un buen muchacho”,
reiteraba la Catrina,
encargado de Despacho,
lo quería pa’ su vitrina.
Ahora sí buscan fiscal
pa’ arreglar todo el desmadre,
que sea bueno y sea letal
no importando que descuadre.
Se fue Pedro el juiciosito,
ya cumplió con su misión,
completó ya el requisito,
se ocupaba alguien de acción.
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