Los llaman "cazadores de vacunas", y no es para menos. Son personas que se forman durante horas para recibir una dosis sobrante de la vacuna anticovid del Kedren Community Health Center de Los Ángeles.
No cuentan con una cita y son de distintas edades. Están ahí porque una vez abiertas las dosis de la vacuna, el personal médico sólo tiene seis horas para aplicarlas.
En ocasiones el sistema para agendar citas no funciona o las personas que tenían citas no se presentan y sobran dosis de la vacuna que de otra forma se desperdiciarían. Entonces algunas de éstas dosis se aplican a personas de la fila, que esperan hasta por 18 horas.
Funcionarios de Salud Pública de Los Ángeles han dicho que no existen líneas de espera para la vacuna y aconsejan a los residentes no presentarse en los sitios de vacunación al final del día con la esperanza de recibir una inyección sobrante.
Sin embargo, se calcula que como máximo quedan unas 30 dosis al final del día.
evr