La Secretaría de Movilidad (Semovi) de la Ciudad de México comenzó esta tarde con la entrega de las primeras 350 tarjetas para combustible a las personas concesionarias de transporte de ruta y corredor.
La dependencia entregará apoyos de 4 mil y 6 mil pesos mensuales a conductores de transporte de ruta y de corredor, respectivamente, durante cinco meses.
- Te recomendamos Semovi contará con trámites vía internet y sistema de citas Política
Lo anterior, con el objetivo de mejorar de manera integral el transporte público de la Ciudad de México y dar el primer paso en la materialización del Programa Integral de Mejora de Transporte Público Colectivo Concesionado.
La entrega física de tarjetas continuará para todas aquellas personas que hayan realizado exitosamente el pre-registro al Programa y que cumplan con los requisitos establecidos en la Convocatoria a la acción social “Subsidio a Combustibles para el Transporte de Pasajeros Público Concesionado Colectivo, clasificado como Rutas y Corredores, 2020” publicada el 19 de mayo en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México.
Esto a partir de un sistema de citas en línea que permitirá evitar aglomeraciones a través de un protocolo y mecanismos de protección de la salud.
La preinscripción al Programa permitirá a concesionarios acceder a diversos beneficios e incentivos para la mejora de la calidad y el servicio del transporte público y, al mismo tiempo, es la puerta para integrar a los concesionarios a un proceso de regularización integral y profesionalización en beneficio de la seguridad vial.
El sistema de pre-registro garantizará ante esta dependencia que los concesionarios tengan toda su documentación actualizada, lo que generará un padrón robusto y completo tanto de unidades como de operadores activos en la Ciudad de México.
El Programa Integral de Mejora para rutas y corredores, además de la entrega de los bonos de combustible, tiene contempladas diversas acciones complementarias, entre las que destacan la actualización de registros públicos, primero de forma digital y posteriormente con una revisión presencial de su documentación y unidades -pospuesta hasta que concluya la emergencia sanitaria-.
Además de la colocación de tecnología en las unidades de transporte (cámaras, botones de pánico y dispositivos GPS); el uso de cámaras de supervisión en los puntos de mayor conflictividad vial relacionados con problemas de operación del transporte público colectivo; así como la dignificación del trabajo de los operadores a partir del otorgamiento de seguridad social (Instituto Mexicano del Seguro Social) para las personas que operan las unidades.
EB