Luego de rendir protesta y como primera "gran determinación de su gobierno", el alcalde de Celaya, Juan Miguel Ramirez, despedirá a todos los Fedepales (ex policías federales) que trabajaban en la corporación de Seguridad y que fueron contratos en la administración de Javier Mendoza.
La medida de rescindirles contratos que aún estaban vigentes generará una erogación de 30 millones de pesos a su gobierno.
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En su lugar, llegarán por acuerdo con el gobierno federal más de 300 elementos de la Guardia Nacional a suplirlos, esto sin cobrar salario al municipio. Todos ellos bajo el mando de un secretario de seguridad y un director de policía de extracción militar.
"Nosotros hicimos un convenio con la Secretaria de Seguridad y con la Sedena, con los jefes de la Guardia Nacional y desde un inicio nos apoyaron. Hicimos una especie de preconvenio con la Marina y nos apoyaron, ellos nos iban a apoyar, pero ellos son un número muy reducido y no les alcanza".
"Nosotros ocupamos en este momento 340 Guardias Nacionales para que sustituyan a los Fedepales. Ya se determinó una serie de cosas en materia de seguridad, ya nos pusimos de acuerdo y platicamos con la Federación, con el Gobierno Estatal, con la gente de aquí".
El nuevo modelo de seguridad se basará en las llamadas "células mixtas", donde los elementos de policía municipal que se quedan saldrán a patrullar acompañados de la Guardia Nacional.
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De acuerdo al alcalde Juan Miguel Ramírez, la determinación de echar a los Fedepales se basó en las peticiones que le hicieron los ciudadanos ante la desconfianza para con los elementos. También declaró que se detectaron irregularidades y faltas en su actuación.
"Ahora van a estar acompañados de los policías y dos Guardias Nacionales o como lo considere el secretario de seguridad (…) es una forma de trabajar distinta a la que era antes; por un lado andaba la policía y por otro andaba la Guardia Nacional, no había primer respondiente".
"Ahora nosotros vamos a tener la colaboración de estas fuerzas y estamos por llegar al acuerdo para que también nos acompañe la policía estatal", explicó.
Habrá casos específicos como los referentes a los ex policías federales (Fedepales) que laboran en la Policía Turística, de los cuales no se tienen quejas, por tal motivo se mantendrán y, acorde a sus resultados, se evaluará su permanencia en la corporación.