"¡Colóquese dentro del cuadro!" pidió el guardia de seguridad a una mujer que llegó corriendo a la Central de Autobuses y frenó para hacer caso a la indicación, mientras le colocaban un chorro de gel antibacterial y le fue tomada la temperatura, medidas que está realizando el lugar como parte de la contingencia para evitar la propagación del Covid-19 en Hidalgo.
Esta vez, la mujer no se perdió entre los tumultos, porque la mañana de este miércoles, la terminal permanecía casi vacía, pocos viajeros esperan la salida de autobús, hacia Ixmiquilpan, Apan o Tulancingo, destinos dentro del estado que se mantienen también en cuarentena para evitar que en esta contingencia, Fase 2, la famosa curva de contagio no se agudice en México, ni en el estado de Hidalgo que, hasta este martes por la noche, había registrado ya 3 muertes de hidalguenses por el virus.
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"Parece como si fuera primero de enero, nada de gente, se siente feo ver la terminal así triste porque la gente se mira con miedo, ya no es lo mismo, pero esperamos que salgamos de ésta", dijo un trabajador administrativo a un oficial de vigilancia, quien se mantuvo vigilante de que el bote de gel antibacterial continuara lleno para bañar las manos de los usuarios con éste, como ha sido una de las recomendaciones que ha dado la Secretaría de Salud federal a la sociedad.
"Yo voy a Ixmiquilpan con mi familia", expresó un joven quien el martes pasado recibió la noticia de que ya no tenía trabajo, "pues nos habían dicho que, de seguir la situación así, pues tendrían que cerrar el lugar y me quedé sin trabajo, así que ahora me voy a mi pueblo", indicó Omar Pérez antes de abordar.
Así, uno a uno de los visitantes compró su boleto, mientras esperaban en las sillas metálicas con la Sana Distancia, a las que les fueron colocadas las bandas amarillas para evitar que la gente se sentara una junto a la otra.
"Me parece bien que tomen esas medidas en la Central porque uno se siente más seguro, aunque quién sabe si la gente continúe respetándolas", dijo Roberto Fernández Saucedo, quien viajó a la Ciudad de México por negocios.
El lavamanos comunitario también fue utilizado por algunas personas que llegaron al lugar, aunque muchos otros pasaban de largo por él, "porque de todos modos aunque nos lavemos las manos podemos contagiarnos", expresó uno de los usuarios de la Central, a lo que la mujer, que llegó corriendo al lugar, le contestó "por personas con esa forma de pensar nos contagiaremos todos, ya que se ha repetido que el lavado de manos evita la propagación del coronavirus", para después ingresar a tomar su autobús.
Minutos después el hombre lavaba sus manos con jabón, e ingresó a comprar su boleto para viajar a Apan, "pues de una vez me las lavo, porque llegando a mi casa, ni agua habrá, de eso no se preocupan mucho por lo que el virus ese, espero no se asome por allá".