Gaétan Kuchta, director Artístico de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (OSUAEH), se acomodó el saco, sonrió y con un movimiento suave y firme de la batuta, logró despertar el sentido de los más de 500 asistentes que acudieron la noche del viernes al Symphonic Night Fever, con el que se celebró con música disco a los padres asistentes.
En punto de las 19:10, arrancó el concierto con música disco, la orquesta, conformada por 80 músicos, supo que sería una noche especial, cuando las luces de colores comenzaron a rebotar en la bola de espejos que colgaba desde el centro de la Aula Magna “Alfonso Cravioto Mejorada”, donde se llevó a cabo este concierto.
Con “Boogie Wonderland” inició este recital en el que los recuerdos y el ritmo de la música disco no se hicieron esperar, y tras la introducción sinfónica, Stephy Ruiz salió al escenario, ataviada con un jumper en tono turquesa y una melena risada que bien le quedaba para atraer la atención del público, e hizo lo suyo y conquistó desde el primer momento a los asistentes de este concierto.
El ánimo de la gente despertó desde el primer acorde de “Dancing Queen”, entre violines y la voz de Stephy y Manuelo Hung, cuando un par de asistentes, entre ellos la diputada Corina Martínez, sin inhibición comenzó a bailar de pie, al ritmo también de la música de la banda invitada Flux capacitor, que se mezcló con la sinfónica haciendo una fiesta de sentidos, vibraciones, sentimientos y sonidos que permeó en el público hidalguense, que le entregó esa noche sus emociones a la OSUAEH, a la banda y a los cantantes que con carisma y gran voz, los cautivaron.
Entre temas de Donna Summer, que lograron que parejas asistentes y sus pequeños hijos se movieran con ritmo, así como de cada sonido que salió de los violines, violonchelos, violas, trompas, trombones, trompetas y clarinetes bajo la dirección de Kuchta, salpicaron de alegría el recinto, respuesta que alegraba al director tras las sonrisas que brindaba desde el atril, donde surgió la magia de la noche del viernes, al saber que se había seleccionado los temas adecuados para cautivar con música a los asistentes.
“Last Train to London” fue el tema que se eligió para que Sthepy y Manuelo, así como la banda Flux Capacitor, ofrecieran en solitario y el público descubriera el gusto por la música disco que, al igual que el padre de Kuchta, disfrutaran entre luces, sonrisas y alegría que se vivió durante la presentación.
Pero el baile, los recuerdos y las luces de colores no se detuvieron ahí, sobre todo cuando los temas de la película de Vaselina, como “Grease”, “You’re the One That I Want” y “Summer Nights”, hicieron bailar a todo el público presente que se olvidó por un momento de la compostura que se espera en un recinto sinfónico, bailando y cantando a todo pulmón.
En cuanto Kuchta movió su batuta y salió el primer acorde “I Will Survive”, la gente hizo fiesta, y continuó con “Macho Men” y “YMCA” que bailaron al compas con los movimientos continuos que se realizan con este tema de Village People, y el concierto se intentó cerrar con “I Love You Baby”, de Donna Summer, pero el público pidió una más, cerrando esta noche con “September”, con el que se ganaron más de un minuto de aplausos Stephy, Manuelo y sobre todo Kuchta y los músicos de la Orquesta Sinfónica de la Universidad del estado, quien sonrieron y festejaron esta noche, en la que fueron aplaudidos y reconocidos por Gloria Tovar, esposa del rector de la UAEH, Adolfo Pontigo Loyola.
“Se logró el cometido, se logró cautivar a la gente y continuaremos realizando este tipo de conciertos”, amenazó Kuchta con una sonrisa extasiada, quien tiene como objetivo, acercar a un mayor público al arte, a la orquesta y lo hará a través de la música que llega a todos, sin olvidar que los temas clásicos son parte de la magia y la riqueza de todo ser humano.