Las viviendas están a menos de dos metros de la laguna en la colonia Bahía, en el sector Miramar, y la mayoría de las familias viven de la pesca de diversas especies e incluso del cocodrilo, el cual extraen la carne, la piel y hasta su grasa que ayuda a curar enfermedades.
Reconocen los habitantes del sector, que es colindante con la laguna La Aguada, que la carne de cocodrilo “tiene un sabor muy peculiar, es muy rica y sobre todo hay quienes la cocinan muy rica con una salsa borracha”.
Los vecinos explican que no todos los días capturar saurios, a los cuales consideran muy tranquilos, ya que no es una tarea fácil y su captura requiere de por lo menos tres personas para tener éxito y menos riesgo.
Al capturar un espécimen de cuatro metros se “podría alimentar fácil a 50 familias”, por eso se define vender la carne entre los habitantes del sector, que tienen buena referencia “al considerarlo un platillo delicioso”.
La grasa del cocodrilo, “es algo que a mí me consta”, dijo una mujer que habita en la colonia, es buscado por las madres de familia que tienen hijos con problemas respiratorios y al tomarlo han tenido soluciones inmediatas.
“La grasa se calienta hasta que se hace líquida, se pone en recipientes y se vende, esa sirve para curar a los niños de asma o bronquitis. Yo le di a mi hijo, él se mojaba tantito y terminaba en el hospital; tomó el aceite de cocodrilo y se curó”, declaró.
ELGH