Tras esperar una hora para que el grupo de paristas y algunos encapuchados permitieran el ingreso a estudiantes y profesores al CCH plantel Azcapotzalco, el desorden se hizo presente por el número de alumnos que deseaban entrar.
El enojo de padres de familia que acompañaron a sus hijos a la reapertura del colegio de la UNAM, y quienes esperaban en la acera, comenzó a vislumbrarse en sus rostros y expresiones verbales.
“Ellos (los paristas) son si acaso unos 50 y son miles quienes sí quieren estudiar, deberíamos meternos y sacar a este grupo”, señaló un papá que esperaba que su hijo, formado en la larga fila, entrara para tomar sus clases.
Aunado al desorden en la acera, los alumnos que entraron salían minutos después para anunciar que “los salones están cerrados” y “no hay profesores”.
A los docentes se les permitió entrar hasta después de las 15:00 horas, después de que padres de familia exigieron con gritos que se les dejara ingresar.
Los maestros también salieron para reclamar que los salones y laboratorios estaban cerrados, como la profesora del Taller de Lectura y Redacción, Gloriela Salas Castañón, quién cuestionó molesta “¿a qué me quedo?”, pero aseguró que mañana regresaría en espera de que mejore la situación, porque de los 250 alumnos a los que les imparte clase, sólo había 20.
Cerca de las 16:00 horas continuaban ingresando alumnos al plantel educativo, con lo que se normalizaron las actividades después de permanecer cerrado 22 días.
EB