La pandemia del covid-19 deja una herida en la población que no se cura ni con el proceso de vacunación que está en marcha ni con los discursos de gobierno en torno a la disponibilidad de camas en hospitales, expresó el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa.
Al encabezar la misa dominical en la Basílica Catedral de Puebla, inmueble que se mantuvo con menos de 30 por ciento de aforo y en donde se siguieron las medidas sanitarias como sana distancia y aplicación de gel antibacterial, Sánchez Espinosa advirtió que, próximamente, se revelará la verdadera dimensión de los efectos de la pandemia en las vidas humanas y destruidas.
“Este año ha sido de desesperanza, de agotamiento, de miedo generalizado y está dejando una herida que no se curará ni con vacunas, ni con discursos sobre las camas que hay disponibles en los hospitales. Es una herida que no tardará mucho tiempo en revelarse en su verdadera dimensión de vidas humanas rotas y destruidas”, apuntó Sánchez Espinosa.
El líder de la grey católica en Puebla reconoció que desde la aparición del virus del covid-19 y tras la primera muerte en la entidad en marzo de 2021, se registran meses de horror, de pérdidas y de desesperanza.
“Hoy seguimos pidiendo por todos nuestros hermanos que han partido por esta pandemia hacia la casa del padre, por todos los que están enfermos, por sus familias. Han sido meses de horror, ha sido un año de horror, de pérdidas, de conocidos, de familiares, de seres cercanos, de seres queridos”, manifestó el líder de la grey católica.
Sánchez Espinosa destacó que, a pesar de las adversidades, es momento de mantener la esperanza y de apoyar a las personas que más necesidades enfrentan en medio de la pandemia que suma más de un año.
“Estamos viviendo un tiempo difícil, pero dice el Papa: tenemos que salir adelante, tenemos que salir adelante, tenemos que salir de este túnel para volver a estar juntos porque esa no es la iglesia, tenemos que salir adelante, tenemos que salir de este túnel para volver a estar juntos”, agregó Sánchez Espinosa.
El arzobispo poblano llamó a defender la vida, desde la concepción y hasta el último minuto de la vida, ante lo cual, pidió a la población mantener las medidas que recomiendan las autoridades sanitarias ante la pandemia del covid-19. "Tenemos que tomar riesgos, pero con responsabilidad. Nosotros amamos la vida, nosotros respetamos la vida desde su concepción hasta su muerte naturales. La vida es el derecho más esencial del hombre. La vida es cuestión de derechos humanos, no es cuestión de religión. El derecho fundamental del hombre es la vida. Si no tenemos derecho a la vida, no existirán los demás derechos. Por eso, queremos la vida, queremos la salud, queremos seguir viviendo. Le pedimos al señor que nos conceda otro tiempo, cuando él diga”, agregó.
Comentó que todos los días, está al pendiente del informe que brinda el gobierno del estado en materia de salud y sobre el avance de los casos de covid-19 en la entidad. “Ellos tienen la responsabilidad de atender esta pandemia. Yo estoy informándome cada día, cada día, para irles haciendo recomendaciones a ustedes”.
Por último, Sánchez Espinosa llamó a no bajar la guardia ni a confiarse porque la pandemia todavía no termina, ante lo cual, es fundamental que tanto las personas vacunadas como las jóvenes y, todos en general, sigan las recomendaciones de salud.
“Nuestra vida está en sus manos, por eso, en estos meses de horror, de pérdidas de familiares, conocidos, tengamos nuestra fe y confianza en el señor".
AFM