Ante la crisis económica actual que se encamina hacia la estanflación en México, el desempleo aumentará durante los próximos 12 meses; además, el poder adquisitivo continuará reduciéndose con efectos negativos para las familias que contarán con el mismo dinero, pero no podrán adquirir los mismos productos ni alimentos.
En el punto anterior coincidieron los investigadores del Tecnológico de Monterrey, Howard Matthew Richards, académico en Negocios y Ciencias Políticas; y Omar Cerrillo Garnica, investigador en Ciencias Sociales, para quienes la clave para enfrentar la crisis se encuentra en lograr que el país sea autosuficiente en la producción de maíz y en reducir los impactos de los fertilizantes.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), al cierre del primer trimestre de este año, en el mes de marzo de este año, Puebla registró en marzo una tasa de desocupación de 3.4 por ciento. El dato sobre desocupación considera a quienes estaban sin trabajar, pero que estuvieron buscando empleo durante el tercer mes de este año, situación en la que se ubicaron 103 mil 525 poblanos respecto a la Población Económicamente Activa (PEA) que rebasa los tres millones de personas.
En abril de 2022, en la ciudad de Puebla los alimentos, productos y servicios aumentaron de precio en promedio 7.25 por ciento a tasa anual; mientras que Izúcar de Matamoros la inflación se colocó en 7.71 por ciento, por una combinación de factores locales e internacionales.
Howard Matthew Richards, académico en Negocios y Ciencias Políticas del Tec de Monterrey, destacó que está latente la posibilidad de que se presente la estanflación, fenómeno que se caracteriza por un aumento de precios de alimentos y, al mismo tiempo, el estancamiento económico en donde el Producto Interno Bruto no crece ni se generan opciones de empleo que la población requiere.
La estanflación se traduce en repercusiones negativas para la población porque aumentan los niveles de desempleo y, al mismo tiempo, la inflación aumenta con lo que se agrava la pérdida de poder adquisitivo, destacó el especialista.
En su oportunidad, Omar Cerrillo Garnica, investigador en Ciencias Sociales del Tecnológico de Monterrey, explicó que los problemas que se presentan en la producción agrícola de México se relacionan con un elevado precio y la escasez de fertilizantes, los cuales, llegan de Ucrania y de otras naciones europeas.
Ante la situación actual, el investigador resaltó la importancia de poner en marcha acciones para enfrentar la inflación y para impulsar la disponibilidad y distribución de insumos para la producción de alimentación básicos.
CHM