El gobierno de México, a través de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), no ha tomado en consideración a los habitantes de Tula de Allende para elaborar un proyecto que resuelva el riesgo de inundaciones en el municipio,
denunciaron los integrantes de la Gran asamblea de damnificados.
Los miembros de la organización señalaron que el pasado viernes circuló un comunicado, en el que se informó sobre el tema, en el cual “no se consideró por ningún motivo la participación de la sociedad civil, ni de esta organización”.
Aunado a ello, acusaron que “hasta la fecha no existe ninguna mesa de trabajo con la sociedad civil organizada por parte de ninguna entidad gubernamental” y en esta materia advirtieron que no permitirán “que se quiera construir soluciones sin la participación de los damnificados de esta ciudad, el sector más importante para ser considerado, pero a quien menos se ha escuchado”.
Denunciaron su inconformidad por la “falta de interés de la Conagua por responsabilizarse de la problemática y darle la cara a la ciudadanía”, a la par que exigieron “la presencia de un representante legítimo de la Conagua y no de figuras como Ricardo Baptista, que no representa por ningún motivo los intereses de las familias damnificadas de Tula, ni tiene autoridad para hacer un pronunciamiento de este tipo".
Más aún, consideraron que “es el momento de representantes que tengan el valor moral de dar soluciones y alternativas, no que utilicen y lucren con el dolor de cada una de las familias que perdieron todo el 6 y 7 de septiembre" y manifestaron que por ningún motivo permitirán "la simulación, ni la negociación a costa del beneficio la ciudad”.
El colectivo externó su malestar “con la Conagua, al no respetar los acuerdos y las mesas de trabajo realizadas en la Ciudad de México, previamente construidos por la organizaciones de la sociedad civil de Tula, en donde la dependencia se comprometió a incluir expertos externos a la problemática”.
Incluso dieron a conocer que la dependencia “canceló repentinamente la única mesa de trabajo donde fue convocada la sociedad civil el pasado 2 de febrero” y evidenciaron que el plan de la Conagua no busca “una solución profunda a la problemática del río Tula y nos da señales de que la ciudad de Tula de Allende seguirá sufriendo estragos por inundaciones más recurrentes”.
Por lo anterior pidieron unidad a todas las organizaciones de la sociedad civil para que se pronuncien al respecto, a fin de que las autoridades replanteen su postura en torno al tema y consideren a los damnificados en la solución a la problemática.
Demandaron una pronta respuesta de parte de la Conagua pues reiteraron que la dependencia debe dar la cara y asumir su responsabilidad en el tema.