La madre de Juan David, menor de 11 años asesinado por su padrastro en Irapuato, se encuentra desaparecida desde hace cinco días; esto luego de las declaraciones que hizo ante la fiscalía y medios de comunicación, en donde mencionó que ella fue testigo fiel, del brutal asesinato perpetrado por su pareja.
Fue el pasado 13 de mayo que en el interior del hogar de la señora Reina María de los Ángeles Bonilla Reyes, de 34 años de edad, se suscitó un fatal crimen, en donde su primogénito de nombre Juan David murió a manos de su padrastro Miguel Ángel N, quién lo asesinó a golpes para después sacar el cuerpo en una bolsa negra.
Bajo amenazas y aterrorizada, la señora Reina Bonilla salió un día después a declarar que su hijo se encontraba desaparecido, argumentando que se había salido de su casa por si solo, lo cual no fue así, pues diez días después salió declarando la versión real de los hechos.
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Se trató de un homicidio doloso en donde su pareja, que era ministerial y actualmente laboraba como policía municipal de Irapuato, lo mató con hazaña solamente por tenerle coraje y por creer que era el consentido de la señora Reina.
“Cuando él le quita la vida a mí me tenía encerrada, amenazada, que si me salía iba a quitarme a mis otros niños, me encerró en un cuarto, ya no escuchaba nada de mi niño, no lo golpeó en presencia mía, cuando yo salí ya lo tenía en el suelo, todavía estaba consciente, lo toque del estómago para ver si todavía tenía pulso y si sí tenía pulso mi niño, hablé hasta ahora porque me tenía amenazada” refirió Reina Bonilla.
Juan David era el mayor de tres de los hijos de la señora Bonilla, dos de su primer matrimonio, y tuvo un tercero de su actual pareja, quien comenta que desde hace años atrás David era víctima de violencia y humillaciones por parte de su pareja Miguel Ángel Barrón.
“Le comenté que por qué lo hizo, y nada más se quedó en shock, no me dijo nada, solamente lo golpeaba con la mano, lo mató a puño cerrado” refirió la madre del menor.
Actualmente, se sabe que el padrastro fue detenido y un juez lo vinculó a proceso por el delito de desaparición forzada agravada, por tratarse de un menor de edad y por el delito de violencia familiar y moral.