Un ejemplo de vida y superación para todos, así fue como será recordado por familiares y amigos Samuel Isaí.
El joven invidente de 25 años, quien murió el jueves al caer del andén del Metro San Bernabé y ser aprisionado por un vagón, fue despedido en su última morada la tarde del sábado en un panteón de Guadalupe.
Los restos de Samuel Isaí Ornelas Mendoza fueron velados en una funeraria de la avenida Aztlán, coincidentemente casi junto a la estación del Metro donde perdió la vida.
Samuel tenía un gran corazón y ayudó a muchas personas
Jorge Luis Ibarra Jáuregui conoció a Samuel Isaí hace apenas un mes. Supo de su caso y sintió que "algo" lo empujaba a apoyarlo. Le ofreció trabajo temporal, y le prometió que intentaría colocarlo en alguna institución privada o pública.
El hombre, ya adulto mayor, dijo que el joven siempre tuvo un gran corazón y, a pesar de su discapacidad visual, ayudó a muchas personas.
Jorge, en lo personal, tuvo serios problemas de salud hace tiempo y, al tener otra oportunidad de vida, creyó que tenía que hacer algo, ayudar al prójimo, y vio en Samuel a la persona indicada. A él lo conoció por medio de la propia mamá del joven, quien también es invidente.
Samuel Isaí es recordado con tanta gratitud por muchas personas que también tienen discapacidad visual, y quienes acudieron este sábado a darle el último adios.
Al momento de la tragedia Samuel Isaí se dirigía a su trabajo, en una oficina del centro de Monterrey, donde colaboraba con el señor Jorge Ibarra Jáuregui.
- Te recomendamos Observan estudiantes y familias eclipse solar en el Museo Universitario de Ciencias de la UANL Ciencia y Salud
ng