Detecta Udlap que redes sociales cambian comportamientos, polarizan e influyen en percepción

Actualmente las redes sociales más populares son Facebook y WhatsApp con mil 590 millones y mil millones, respectivamente.

Uso de redes sociales. (Especial)
Jaime Zambrano
Puebla /

Las redes sociales como Facebook y WhatsApp cambian comportamientos de los usuarios, logran polarizar ideas y trabajan con la percepción, explicó Zobeida Guzmán, académica del Departamento de Computación, Electrónica y Mecatrónica de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap).

Durante el webinar “WhatsApp, la privacidad en las redes sociales y la responsabilidad del usuario sobre la protección de su información” organizado por la Udlap, Zobeida destacó que las redes sociales tienen tres estrategias principales: primero, comprometen a sus usuarios; la segunda, es crecer, es decir que esos usuarios inviten a otros usuarios a ser parte de estas redes; y la tercera, es monetizar a través de publicidad, motivo por lo que quieren más usuarios para ganar más dinero.

“¿Cómo monetizan? A través del envío de publicidad y del análisis de datos para tratar de encontrar ciertos comportamientos que tenemos en la red social y así, incluso, influenciar estos comportamientos. Realmente hemos visto que sí logran cambiar comportamientos, logran incluso polarizar ideas y trabajan con la percepción de sus propios usuarios, de los usuarios que siguen invitando a otros usuarios y con las emociones de las personas”, destacó.

Actualmente, las redes sociales más populares según el número de conteos activos al mes, estando como primeros lugares de popularidad a Facebook y WhatsApp con mil 590 millones y mil millones, respectivamente.

“Estas redes tienen toda una ingeniería detrás. Estas redes son populares debido a que compiten por la atención de sus usuarios, lo que las hace estar tan activas en la vida del hombre. Esta forma de monetizar a los usuarios y a la información que se obtiene de ellos es un nuevo modelo de negocio; si no estás pagando por el producto entonces tu eres el producto y lo que hacen las redes sociales es vender publicidad segura porque saben que sus usuarios están buscando este tipo de información”, explicó.

De alguna manera, mi dispositivo “sabe” lo que estoy haciendo en cada momento porque a cada aplicación se le otorgaron permisos o accesos a los datos que se están generando, explicó la investigadora de la universidad poblana.

“La mayoría de las aplicaciones tienen acceso a nuestros contactos, a nuestra biblioteca de imágenes, GPS, a muchos sensores que se tiene en el dispositivo; el problema es que no nos damos cuenta de todo lo que estamos accediendo con tal de tener la aplicación. Es importante tener conciencia de qué es lo que realmente estamos aceptando”, manifestó.

Cada acción que un usuario realiza dentro de una red social, dentro de los buscadores o dentro de dispositivos, en las aplicaciones o en los juegos, son monitoreadas para tratar de modelar comportamiento, las acciones y el tiempo utilizado.

“Qué, en dónde, con quién, a quién compramos, a quién vendemos y todos esos datos, ellos van a buscar la manera de monetizarlos. Esta acción lleva años, concretamente desde que existen las redes sociales y desde que algunos se dieron cuenta de este modelo de negocio, lo han estado implementando bajo algunas leyes que no estaban listas para este tipo de tecnologías como las redes sociales”, comentó.

Afirmó que las redes sociales tienen aspectos positivos ya que permiten la comunicación, el trabajo, el entretenimiento, las ventas y el estudio; sin embargo, representan riesgos de los que no hay consciencia y pueden traen consecuencias graves, como adicciones, Fake news, polarización, problemas psicosociales y emocionales en las personas, así como la falta de privacidad y seguridad.

“Las redes sociales son importantes, pero hay riesgos que conllevan y debemos verlos y tomarlos en cuenta. Lo que está haciendo falta es la cultura de consciencia; primero saber que nuestros datos son nuestros y son valiosos, pero al momento de aceptar los términos y condiciones dejan de ser nuestros, ya son públicos. Por ello lo que debemos hacer es leer los términos y condiciones los cuales deben de tener en claro qué es lo que van a hacer con estos datos. Yo soy responsable de mis datos y a quien se los doy y las empresas a quien se los confío deben ser responsables de protegerlos y de utilizarlo para lo que han dicho que los van a utilizar”, finalizó.

AFM

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