En medio de la pandemia feligreses preservan la tradición del Día de la Santa Cruz, y acuden a las iglesias para bendecir sus cruces, como anualmente lo hacen a pesar de las adversidades.
Juan López Grande, 67 años de edad, y originario de Atotonilco de Tula es uno de ellos. Con fe acudió al mediodía a la parroquia Santiago Apóstol, ubicada en el centro de este municipio, para participar en la exaltación de la Santa Cruz.
- Te recomendamos "Trabajando... cómo íbamos a celebrar si no es trabajando" Comunidad
Llegó temprano, para alcanzar lugar, pues dice que ahora con la pandemia de covid-19 se ha restringido el aforo en diversos puntos, entre ellos las parroquias, para evitar contagios. A las 11:30 horas sentado en una de las bancas, marcadas con x y cintas de precaución, para señalizar qué lugares se pueden ocupar.
Dice que desde toda su vida ha participado en esta tradición; sus padres se la inculcaron, y por ello cada 3 de mayo acude con fervor a la parroquia para bendecir sus cruces. En esta ocasión lleva cuatro, cada una para una vivienda, tanto la suya como la de sus hijos, para que tengan la bendición de dios y no les falta nunca la salud y el pan, dice.
El año ha sido difícil, dice, tanto en cuestiones económicas y de salud, y ello desde luego ha impactado a todos, dice, pero confía en que pronto se normalice la situación. A mediados de mayo recibiría su segunda dosis del biológico de Astra-Zeneca.
Es una añeja tradición de fe para él y su familia. Es un día en el que se conmemora además de la Cruz, a los albañiles y en general a los trabajadores de la construcción, en una especie de homenaje por su labor en favor del desarrollo urbano de los pueblos.
Él mismo sabe de las vicisitudes de este oficio. Trabajó por muchos años en la empresa calera situada en la colonia Bóvedas, de Atotonilco, pero desde hace unos años es pensionado, y ahora dedica parte de su tiempo libre a hacer algunos trabajos de albañilería en sus casas o la de sus hijos.
Eso ha reforzado su creencia en esta tradición. “Cada año adorno mis crucecitas, las reparo tantito, las pinte, les pongo flores nuevo y las pongo en las casas por la fe que tenemos en dios y lo agradecidos con él”.
Poco a poco fueron llegando más feligreses a la parroquia, con sus cruces en brazo. Distintas formas, tamaños, texturas, y adornos en cruces confluyeron en esta conmemoración del día de la Santa Cruz.
El sacerdote Flavio Ramírez Benítez pidió durante la celebración por los albañiles y para que mejoren sus condiciones laborales, para luego bendecir las cruces, en un acto de fe, de fe en tiempos de covid.