Dentro de las efemérides que se celebran a lo largo del año, este 21 de enero se conmemora el día internacional del abrazo; celebración que fue creada por Kevin Zaborney, psicólogo estadounidense, quien se percató del estrés que tenía la sociedad día con día y de la poca demostración de afecto que las personas tenían entre sí.
Aunque en su momento las principales razones para la realización de este día tan peculiar, se centraron en el aminoramiento de estrés y el reforzar las muestras de afecto, se ha demostrado científicamente que los abrazos tienen múltiples efectos positivos en la salud de las personas.
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¿Qué beneficios tienen los abrazos?
Además de dar confort, seguridad, y utilizarlos como muestra de afecto, los abrazos aportan muchos beneficios para la salud tanto física como mental. Entre estos beneficios se encuentran:
- Disminuye la presión arterial: Las personas que no tienen mucho contacto físico poseen una frecuencia cardiaca y una presión arterial mucho más alta que las personas que reciben abrazos frecuentemente.
- Reduce el estrés: Abrazar a una persona que está pasando por un mal momento puede ayudarla a reducir su estrés y que se sienta reconfortada
- Disminuye la probabilidad de contraer enfermedades: De acuerdo con algunos estudios, los abrazos pueden reducir la posibilidad de que una persona enferme.
- Reduce el miedo: Abrazar y las sensaciones que provoca dicha acción, puede reducir la ansiedad.
- Aumenta el ánimo: Además de la oxitocina, los abrazos liberan serotonina y dopamina, generando una gran sensación de bienestar y felicidad.
Dato curioso sobre el abrazo:
Hace unos años, se atestiguó por parte de un hospital estadounidense que los abrazos mejoran la salud, esto derivado de un caso de dos gemelas cuyo estado de salud luego del nacimiento permanecía crítico. Luego de unos días en la incubadora, una de ellas empezó a mejorar, así que una enfermera decidió colocarla junto a su hermana y, la más sana de las dos, de forma espontánea abrazó a la otra. La sorpresa fue que, luego de esto, el ritmo cardíaco y la temperatura de la otra bebé se normalizaron y logró mejorar.
Dicho hecho fue compartido por diversos medios, lo cual terminó dando pie a un cambio en la normativa del hospital respecto a la política de prevención de infecciones.
MLMG