Delia Torres Iturbe y su hija Daniela son originarias del municipio de Toluca, en el Estado de México, se han dedicado a elaborar "osos llenos de amor", peluches que son elaborados con prendas de personas que perdieron la batalla contra el covid-19. Empezaron con familiares directos que fallecieron; sin embargo, después fueron contactadas por otras personas para hacerles otros y con ello mantener la esencia de sus seres queridos.
Daniela explicó que recientemente llegaron a vivir a la casa de sus abuelos en la colonia Casa Blanca, en el municipio de Metepec, pero desde hace mucho tiempo su madre hace manualidades, por lo que no se les complica elaborar estos muñecos.
“Soy licenciada en psicología y por el momento no estoy ejerciendo, pero le estoy ayudando a mi mamá a realizar todas sus artesanías, principalmente los ositos”.
La pandemia de coronavirus ha cobrado miles de vidas en el Estado de México, lo cual han vivido en carne propia, pues uno de sus familiares murió por esta enfermedad; sin embargo, al ver el dolor y la nostalgia, decidieron hacer un oso para que la familia tenga una parte de él durante el duelo. “Murió un tío, familiar de mi papá y no lo creíamos. Mi prima me preguntó si podíamos hacer el osito, lo comenté con mi mamá y empezamos a elaborarlo”.
Después, explicó Delia, comenzaron a ser contactadas por otras personas a través de redes sociales para que les hicieran peluches con la ropa de sus familiares.
“Nos han solicitado esos muñequitos; la prenda la solicitamos lavada, planchada y desinfectada por seguridad de nosotros y de la persona que nos la está entregando”.
Daniela decidió llamar a estos peluches “Ositos llenos de Amor”, ya que son elaborados con cariño y respeto, además de que el objetivo es poder guardar la esencia de aquellos que se fueron, sin un abrazo, sin un beso. “Uno de los primeros que hicimos fue un osito que le regalamos a mi tía para que no sintiera tan fuerte el dolor de la pérdida de mi tío”.
Hasta este momento, señalaron, han entregado 20 con ayuda de las redes sociales e incluso dos los pidieron de Guadalajara, donde una mujer pidió dos ositos con ropa de su marido que era policía y quien murió a causa del SARS-COV-2.
Los peluches tienen un costo de 450 pesos y refieren que no sólo pueden hacerse para recordar a personas que murieron, también pueden ser para llevar consigo la esencia de amigos y familia que se encuentran lejos o simplemente como un lindo detalle.
MMCF