El endurecimiento de penas y una guerra declarada contra el crimen organizado han llevado a nuestro país a padecer niveles de violencia nunca antes vistos con lo que evidentemente el Sistema de Seguridad Nacional ha fallado consideraron especialistas que participaron en el texto Orientaciones para una política criminal integral en el sistema mexicano. Hacia el restablecimiento del Estado de Derecho y de una cultura de paz
El trabajo que fue coordinado por el rector de la Universidad de Guanajuato, Luis Felipe Guerrero Agripino recoge una serie de análisis que tienen que ver desde la perspectiva de derechos humanos cómo incide la política criminal en el sistema de justicia penal, en las víctimas, la seguridad la reforma policial y hasta el sistema anticorrupción.
“Si el estado de derecho los países se me diera solamente por el número de reformas, por el número de leyes y por el número de sanciones y el incremento de penas, pues en México estaríamos en el primer lugar, yo creo que no tendríamos problemas que solucionar, no hubiéramos escrito esto, pero parece ser que justamente es al revés” señaló el rector.
Para el doctor Marcos Pablo Moloeznik, catedrático de la Universidad de Guadalajara que participa en el proyecto existen dos pandemias que han afectado terriblemente a México como son el coronavirus y la violencia endémica por tener un promedio de 29 homicidios por cada 100 mil habitantes lo que habla del fracaso de la política criminal desde la creación del Sistema Nacional de Seguridad en 1995.
“Pero la verdad es que ya han pasado muchos años desde 1995 a la fecha y bueno evidentemente hoy no hay que ser un experto para darse cuenta de que el sistema nacional de seguridad pública, pues ha fracasado.” dijo
Agregó que la política criminal dijo el especialista es una política sectorial del Estado y además una función básica del estado, indelegable pero lamentablemente en el diagnóstico que se hace es que no existen políticas de estado,que son aquellas que trascienden los gobiernos en turno “es decir, que las buenas prácticas van a ser retomadas por los sucesivos gobiernos y se le va a dar continuidad a la política y a las estrategias hacen las líneas de acción y dan como resultado legítimamente lo que la sociedad demanda”.
Para Leandro Astrain Bañuelos otro de los coautores del libro la violencia es multifactorial y las políticas públicas de atención de esta problemática están enfocadas en la sanción y no en un enfoque integral pues solo se fijan en el aumento indiscriminado de penas y tipos penales y también en el establecimiento de regímenes especiales que se caracterizan por la disminución del respeto a los derechos humanos.
“Se ha descuidado como lo señalaba el Doctor Moloeznik, la parte de la prevención, es muy importante que también se tome en cuenta que la política criminal debe de atender otras áreas es decir, nos ha faltado creatividad para realmente atacar las causas de la criminalidad y el enfoque está exclusivamente en la drasticidad del aparato penal” concluyó.
El libro, señalaron los autores, pretende ser una orientación práctica para la elaboración de políticas de combate a la criminalidad, mismas que ya fueron tomadas en cuenta por procuradurías como la de Zacatecas en busca de mejorar la perspectiva de disminución del crimen y la violencia.