En algunos puntos de la colonia Ayotla en el municipio de Ixtapaluca, las familias no tienen agua desde hace más de un mes y cuando les llega son apenas unas gotas que no les permite llenar tambos, cisternas y mucho menos tinacos.
Jessica López vive con su esposo y sus dos hijos, en una casa ubicada en Emiliano Zapata, han tenido que empezar a comprar pipas pues la ropa, el baño diario y los quehaceres de la casa no pueden esperar.
"Nos cobran de a 100 pesos el tambo y del tinaco son 200 pesos, pagamos los 300 pesos y tenemos que reciclarla porque de dónde sacamos agua, el dinero no se nos puede ir nadamás en comprarla, tenemos otros gastos", dijo.
A la quincena una familia como la de Raúl, donde habitan ocho personas, tienen que destinar por lo menos 600 pesos a la quincena para comprar agua.
"La cuidamos porque compramos una tina y nos bañamos ahí para almacenar el agua y eso ocuparlo para lavar el patio, cuando lavamos la ropa recolectamos el agua para echarle al baño y así, además cuando llueve sacamos las cubetas y los botes para que se llenen con el agua que cae del techo", dijo.
Sin mantenimiento
Son alrededor de 20 mil personas las que viven en la comunidad de Ayotla, uno de los pueblos originarios del municipio que tiene 13 colonias, por lo que el suministro de agua se rige por usos y costumbres y cuentan con un comité autónomo.
Sin embargo, durante 30 años el comité autónomo estuvo a cargo de una sola familia, quién es a decir de los habitantes no brindaron el mantenimiento necesario a la red hidráulica lo que complica la distribución del agua potable debido a las fugas ya que incluso en algunas calles las mangueras están totalmente dobladas.
"Son mangueras muy viejas nosotros incluso ayudamos a poner esta red de agua sabemos dónde están las llaves de paso y donde podrían estar los problemas a veces los vecinos nos juntamos y solucionamos el problema, sin embargo, después de días vuelve a tener fallas y nos dejan sin agua no vemos el caso de seguir pagando el servicio si las personas que están a cargo no atienden los problemas con ese dinero", detalló Rodolfo, otro de los vecinos.
Disputa por suministro
En 2020 inició la disputa por el control de los pozos que abastecen a las familias, esto debido a que la falta de agua era recurrente y en ocasiones hasta dos meses se quedaban sin el servicio.
Los inconformes atribuyeron todas las anomalías a la familia Díaz Mena quiénes estuvieron al frente de la administración del agua potable cuyo dinero, aseguran, nunca se utilizó para dar mantenimiento a la red y a los pozos.
En febrero de ese mismo año, los habitantes convocaron a asamblea y lograron elegir a un nuevo comité ante notario público, sin embargo, muchos de los habitantes dejaron de pagar el agua y otros más continúan dando la cuota al antiguo comité, quiénes pese a que ya no tienen el control continúan con oficinas abiertas sobre la Avenida Cuauhtémoc cobrando el servicio presuntamente de manera ilegal.
KVS