Monterrey y su zona metropolitana se distinguen por su industria pujante y su desarrollo económico. Sin embargo, quienes viven cerca de las fábricas conocen "la otra cara de la moneda" y padecen diariamente el ruido, los olores y las emisiones contaminantes.
En un recorrido de MILENIO Monterrey se constató que las afectaciones de los vecinos son similares: alergias, tos, ronchas en la piel y hasta daños en sus viviendas ocasionados por las vibraciones.
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Por ejemplo, vecinos de la colonia Infonavit Cuauhtémoc, en Santa Catarina, se quejaron por el olor que despide Protexa, ubicada a 1.2 kilómetros de distancia.
"Todos los días huele muy feo, en la madrugada, en las mañanas y en las noches. Son como tres o cuatro veces al día que desprenden olores, y la verdad, de tanto, te duele el estomago y empiezas a toser", refirió Jaquelin Treviño, de 33 años de edad.
Jaquelin agregó que es común enfermarse de tos, diarrea y alergias en la piel, pero lo que más le preocupa es su embarazo: "Yo estoy embarazada. Yo no sé si eso sea dañino para el bebé".
En Hacienda El Palmar, en Santa Catarina, se encontraron casas cuarteadas presuntamente por la operación de las pedreras ubicadas a poco más de 3 kilómetros de distancia.
"Cuando explotan las minas se cuartean las casas, se cimbran vidrios y puertas. Entonces mi casa arriba está cuarteada.
"Cada vez que dinamitan más se vuelve a agrietar, entonces hay que repararlo rápido y son gastos que uno no tiene", señaló Sara Lizaola, de 48 años de edad.
Otro caso es el de Claudia Torres, que vive a 200 metros de Ternium. Su casa está tapizada por una lona de plástico pero no es suficiente para evitar que el polvo entre. Tanto ella como sus vecinos han desarrollado alergias en la piel y enfermedades respiratorias.
"Tenemos alergias en la piel, nos sale como unas ronchitas ¿verdad?", le dijo a otra vecina. "En una ocasión mi hijo se enfermó también de alergias y nos recomendaron irnos de aquí pero pues está difícil".
En cada lugar los vecinos se mostraban desalentados por la falta de atención de las autoridades, ya que el problema lo padecían desde hace muchos años.
MILENIO Monterrey publicó este lunes que durante el primer semestre del 2019 las denuncias contra empresas contaminantes aumentaron un 414 por ciento a comparación del mismo periodo el año pasado.
La Procuraduría Ambiental del Estado ha recibido 72 quejas pero solo ha aplicado 11 sanciones económicas y 4 apercibimientos este año.