Aunque para especialista en el México prehispánico el tema de recargarse de energía en los centros ceremoniales y religiosos de las culturas originarias no pasa de ser un mito, para una gran cantidad de personas es una tradición que debe mantenerse y seguir los rituales ya clásicos en estas visitas a las zonas arqueológicas: vestir de blanco, levantar los brazos y dirigir las manos al sol con un fondo musical producido por enormes atecocolli y sonidos surgidos del teponaztli y del huéhuetl.
Acceder a estas zonas tiene un costo determinado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), aunque el mismo organismo exenta de ese pago a personas mayores de 60 años y menores de 13, así como a jubilados, pensionados, personas con alguna discapacidad, profesores y estudiantes en activo, pasantes e investigadores en proceso de estudios afines a museos, monumentos y zonas arqueológicas.
En Hidalgo hay cuatro de estas zonas arqueológicas administradas por el INAH y, de acuerdo con la representación del Instituto en el estado, permanecerán abiertas al público este lunes 21 de marzo, durante el equinoccio de primavera: la de Tula, en el municipio del mismo nombre; Huapalcalco, en Tulancingo; Pañhú, en Tecozautla, y la de Xihuingo, en Tepeapulco.
Lugar de tules
En el municipio de Tula de Allende, se encuentra la zona arqueológica del mismo nombre, famosa por los atlantes y por un mito relacionado con Quetzalcóatl quien, supuestamente, habría sido desterrado de la ciudad.
A este sitio se puede llegar por la autopista 57, tomar la desviación a la altura del kilómetro 77 hacia la ciudad de Tula, donde encontrará suficientes señalamientos que le indican el acceso a la zona arqueológica. Si se usa el transporte público, hay que llegar hasta el centro de la ciudad donde puede abordar un colectivo que le dejara justo en la entrada al sitio y se dirige a Actopan, Iturbe o Santa Ana.
El horario del lugar es de martes a domingo de 10:00 horas a 14 horas y con un costo de acceso de 85 pesos.
Camino caliente
El Pahñú es un lugar sagrado destinado al Dios del Fuego Viejo, Otontecutli, en la cultura otomí. Se encuentra a 15 kilómetros del municipio de Tecozautla. Hay que tomar la carretera a Huichapan y luego la salida a la localidad de Bomanxhotá hasta llegar al poblado La Mesilla, donde al pasar la iglesia se encontrará un camino de tepetate.
A la zona se puede acceder de lunes a domingo en un horario de las 10:00 horas hasta las 15:00 horas con un costo de 70 pesos.
Casa de madera
Huapalcalco es un sitio en el que se han encontrado importantes e interesantes hallazgos sobre la cultura náhuatl que van desde proyectiles, herramientas y armas, además de todo tipo de objetos de obsidiana.
Para llegar hay que tomar la vía Pachuca-Tulancingo y unos dos kilómetros antes de llegar a esta última ciudad, tomar una desviación hacia el norte y avanzar unos tres kilómetros más hacia el poblado de Huapalcalco. Unos centenares de metros antes de llegar al poblado, está la zona arqueológica cuyo horario de acceso es de las 10:00 horas a las 15:00 horas.