Aunque consideró que la razón no precisamente puede derivar de diferencias personales entre autoridades sino de priorizar otros proyectos en el país, el cardenal de Guadalajara, Francisco Robles Ortega lamentó que en el presupuesto de la federación para Jalisco se queden fuera grandes obras para la entidad.
Señaló que el no apoyar los trabajos, puede traer consecuencias sociales importantes, por lo que esperaría que la situación se resuelva con diálogo y no haya necesidad de que el Estado se endeude para sacarlos adelante, como lo advirtió en días pasados el gobernador, Enrique Alfaro: “Son obras prioritarias, son obras urgentes que deben ser consideradas para sacarse adelante (…) Ojalá que el diálogo ayude a superar esas dificultades y ojalá que se reconsidere el presupuesto para Jalisco”.
A pesar de esto, el Arzobispado afirmó que una decisión así, y sus reacciones, eran de esperarse, pues lo que trata de establecer el nuevo gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador es “una auténtica transformación”, que requiere cambios en la estructura de cómo se habían estado haciendo las cosas.
Sin embargo, admitió que aunque estos frentes son necesarios, se deben replantear y explicar más a detalle a la sociedad en general, que al momento se mantiene expectante y preocupada, pues “no tiene la explicación suficiente para entender estos pasos que se están dando”.
Volviendo a las confrontaciones que podrían estarse dando entre el gobierno federal y estatal, explicó que de ser así deberían frenarse, pues estas faltas de entendimiento frenan el desarrollo, ya que no solo dañan a la sociedad, sino también las relaciones con la industria. “Es un mal mensaje que se manda a los inversionistas, a los capitales que vienen de fuera, y que son necesarios para el desarrollo de nuestro país”, destacó.
Austeridad con equilibrio
Sobre las medidas de austeridad que han promovido los nuevos gobiernos federal y estatal se apliquen en distintos ámbitos, Robles Ortega considera que estas deben aplicarse con equilibrio para no perjudicar a los trabajadores, como por ejemplo, despidiéndolos.
“Si se reduce el personal, pues qué va a hacer esta gente que tenía su fuente de trabajo, a dónde se va a ir, cómo se va a acomodar. Todas esas cosas… por eso decía, las decisiones tomadas deben ir acompañadas de una información más puntual” para despejar malos entendidos, declaró.
MC