El 30 de abril fue el día en el que le cambió la vida a la señora María Guadalupe; la fábrica de aerosoles en la colonia Álamo Industrial de Guadalajara, donde trabajaba su esposo Jorge fue consumida por un incendio que provocó algunas explosiones y 23 días después aún no sabe de su paradero.
“Tengo ya 23 días con incertidumbre, dolor, tristeza de no saber qué pasó con él, dónde está, todo ha sido como ten paciencia, pero pues si es algo frustrante”, dijo en entrevista para este medio.
Según indicó la Fiscalía de Jalisco, continuar realizando labores de búsqueda, pero al aún existir material que genera riesgo para el personal, no se puede llevar a cabo una búsqueda minuciosa, por lo cual siguen llevando a cabo el retiro de escombro.
“Hasta el día de ayer, tengo conocimiento que han estado sacando contenedores con producto que aún permanecía ahí y que hay es un peligro para ellos todavía en cuestión de andar buscando y en cuanto se sacara todo eso ellos continuarían con la búsqueda más minuciosa con maquinaria para dar con el cuerpo en este caso”, detalló.
Han pasado más de tres semanas y María vive con el dolor y la incertidumbre por no saber el paradero de su esposo Jorge Octavio Rivera por lo que lo único que quiere es que se enfoquen en agilizar los trabajos de búsqueda para dar con el paradero de su marido, que desde hace más de 5 años se desempeñaba como montacargas de la empresa y en el peor de los escenarios, darle un último adiós y por fin descansar de este capítulo de su vida que ella cataloga como terrible.
“Pues pido a las autoridades más enfocarse en esa parte, yo lo único que pido es saber dónde está él verdad y acabar con esta frustración y esta angustia porque es algo horrible, una tristeza dolor se siente y que no he descansado desde hace 23 días”, puntualizó.
Hasta el momento, y lo último que le comentaron por parte de la empresa, es que se harían responsables de cualquier gasto al igual que de apoyo económico, entregándole lo que le correspondía a Jorge.
MC