Los terrenos que estuvieron llenos de maleza, tenían edificaciones viejas sin valor histórico, se han convertido en estacionamientos, lo cual es cada vez más frecuente en el Centro de Tampico.
Uno de los ejemplos claros está en el cruce de las calles Obregón y Aduana, en el Centro de Tampico. Era un terreno que estaba lleno de maleza y recientemente, está disponible para estacionamiento.
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Hay otros espacios de este giro que se han abierto a tan solo algunas cuadras de oficinas, de despachos y de la presidencia municipal de Tampico, lo cual responde a una necesidad de la población por dejar sus vehículos, ya sea por el tema de las compras o por esparcimiento.
“Han llegado los permisos de construcción en los cuales se decide demoler edificaciones que no tienen ningún valor histórico, algunas zonas que estaban llenas de maleza y se les ha otorgado el permiso”, puntualizó el Secretario de Desarrollo Urbano, Carlos de la Rosa Durán.
A la Secretaría de Desarrollo Urbano de Tampico se han presentado 12 permisos para este tipo de obras, de demoler construcciones que no eran históricas y dejaron el terreno limpio.
Ahora, dichos espacios se vuelven una opción para que la población se pueda estacionar en el Centro de Tampico, que es uno de los lugares más visitados de la ciudad.
Dichas construcciones o espacios se encuentran en el primero y segundo cuadro de la ciudad, los cuales manejan diversas tarifas de estacionamiento por hora.
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SJHN