Aunque el Gobierno Estatal mencionó que en caso de aumentar la tarifa del transporte reemplazarían 500 unidades que exceden el tiempo de antigüedad permitido por ley, la realidad es que existe un rezago de mil 089 unidades que debían ser retiradas de circulación.
Esto con base en información obtenida vía transparencia de la Agencia Estatal del Transporte, sobre los modelos utilizados del 2005 al 2018. Los documentos en posesión de MILENIO Monterrey revelan que los camiones que excedían los 10 años de antigüedad del 2005, 2006, 2007 y 2008 eran 2 mil 253.
La Agencia Estatal del Transporte (AET) informó del reemplazo de mil 164 unidades obsoletas, quedando así un rezago de mil 089 camiones, con corte a marzo de 2018. Solo las unidades que pertenecían a un modelo 2008 son 514, pero esto sin contar las unidades de modelos anteriores (2005, 2006 y 2007).
En este sentido, de acuerdo con la información más reciente proporcionada por la AET, el margen de unidades que necesiten ser retiradas puede ser mayor a las 500 que anunció el lunes el secretario general de Gobierno, Manuel González Flores.
Esto se sustenta en el artículo 29 de la Ley de Transporte para la Movilidad Sustentable del Estado de Nuevo León, que establece que las rutas no podrán exceder una antigüedad de 10 años.
González Flores aseguró que el resto de las unidades cumple con este candado de antigüedad y se ajusta a los parámetros de consumo de combustibles de acuerdo con la normativa ambiental, sin embargo, no es posible comprobar esto debido a que un 77 por ciento de las unidades no ha sido revisada. Lo anterior porque del 31 de abril del 2017 al 31 de marzo del 2018 solo se revisaron un total de mil 078 camiones de una flotilla de cuatro mil 702 unidades.
Entonces un 77 por ciento no cuenta con un acta de inspección físico-mecánica que los acrediten para circular. Esto aunado a las fallas propias del transporte, como la falta de clima en un 28 por ciento, aproximadamente, del total de unidades, de acuerdo con la información proporcionada a este medio.