Es bien sabido que la formación profesional dentro de los Estados Unidos es un reto monetario para muchas familias que buscan ofrecer una educación superior a cada miembro que se encuentra estudiando.
Durante High School, el gobierno e instituciones de mucho prestigio ofrecen becas para aquellos que cuenten con los mejores promedios y actividades extra curriculares que sumen a su expediente para ser admitidos y tener una educación superior de excelencia.
Leticia Isabel Padilla, de 24 años, es una estudiante nacida en el condado de San Diego que pasó la mayor parte de su vida residiendo en la ciudad de Tijuana, México. Durante su último año de estudios de bachillerato, la gran incógnita inició; ¿dónde comenzaría su formación profesional? es un pensamiento que miles de jóvenes generan justo antes de terminar la preparatoria.
Isabel tiene una hermana mayor, comparte que desde pequeña, veía a su hermana levantarse temprano para emprender un largo recorrido para cruzar de Tijuana a San Diego para estudiar la universidad.
¨Cuando mi hermana se encontraba en su formación profesional, me llamaba mucho la atención todo el esfuerzo que hacía diariamente para llegar a la universidad. Se levantaba muy temprano para cruzar caminando hacia Estados Unidos. De repente, pensé que yo también quería hacerlo¨, compartió Isabel.
El momento de Isabel para empezar sus estudios universitarios había llegado, pero de pronto se encontró con 2 obstáculos que al principio, parecían enormes. No hablaba el idioma inglés e iniciar la universidad desde ¨0¨ resultaba excesivamente caro.
En Estados Unidos, existen instituciones comunitarias denominadas como Community College que permiten a los estudiantes realizar parte de sus estudios pertenecientes al sistema de universidad para disminuir el costo total de una carrera universitaria.
Isabel comparte que durante 4 días a la semana, se levantaba a las 2:00 AM para poder cruzar caminando, la espera de cruce variaba entre 2 a 4 horas de espera, así que llegaba alrededor de las 4:00 AM para cumplir con su horario escolar que comenzaba a las 8:00 AM.
¨Yo no hablaba nada de inglés, así que comencé la materia de English as a Second Language (ESL sus siglas en inglés) durante un periodo de 2 años para poder empezar mis estudios en college¨, dijo Isabel.
¨Es un proceso largo, pasaron 2 años para que yo pudiera dominar el idioma y poder seguir adelante para alcanzar mi meta, terminar mis estudios en el colegio comunitario, obtener un buen promedio y que la universidad me admitiera como estudiante¨, agregó.
Aunque estudiar el college previo a ingresar a la universidad pueda disminuir el costo educativo, las tarifas cambian para los residentes del país y extranjeros que desean seguir los mismos pasos.
Un residente estadounidense paga una cuota de aproximadamente $46 dólares más impuestos por unidad de materia, mientras que los extranjeros deben cubrir un aproximado de $275 dólares por unidad.
Durante la formación educativa en el college, los estudiantes reciben educación básica, conformada por materias como matemáticas, geografía e historia. Acorde a su interés profesional, los estudiantes deben cumplir con créditos suficientes, incluyendo materias de su área de interés.
Los estudios universitarios pueden costar alrededor de $40,000 dólares, con la ayuda de la certificación obtenida en college, la cuota se disminuye a $2,300 dólares.
Isabel quería ingresar a la carrera de mercadotecnia, durante 5 años de estudios en Southwestern College, ubicado en el condado de San Diego, obtuvo un promedio general de 3.68. Para ser admitido a una universidad, el promedio va desde 1 a 4 puntos.
Inició su proceso de selección para el ingreso a San Diego State Universiry (SDSU) en noviembre del 2019. En febrero del 2020, recibió la noticia que tanto esperaba y por la cual, había luchado por 5 años. Fue admitida en la institución para estudiar la carrera de mercadotecnia.
El gran momento había llegado, 2 años de universidad faltaban para convertirse en profesionista.
Para Isabel, la pandemia por Covid-19 ha sido un gran impedimento para generar conexiones educativas, ya que, desde su primer día de clases, ha permanecido en la modalidad en línea sin ningún tipo de contacto presencial con sus maestros, compañeros e institución.
¨Mis espectativas eran muy altas y por alguna razón siento que no he podido disfrutarlo por el hecho de la pandemia, pero tengo la esperanza de poder generar conexiones con personas que me pueden ayudar en un futuro, hacer amistades y vivir la experiencia universitaria¨, dijo Isabel.
Isabel termina la universidad en agosto del 2022, a pesar de las restricciones por el Covid-19, las ganas de concluir con sus estudios superiores la impulsa a convertirse en una persona que aporte a la sociedad, ya que como parte de la comunidad latina, encuentra una ventaja en la conexión de 2 naciones.
¨Conectar con 2 naciones en la universidad es símbolo de formación personal y profesional. Me siento orgullosa de ser latina y mexicana, siento que poder vivir una experiencia binacional abrirá muchas puertas para mi carrera y podré ayudar a mi comunidad, estoy feliz de tener esta oportunidad y poder ser una mejor persona¨, compartió.
Como Isabel, existen miles de jóvenes de origen latino que deciden tener una educación superior en Estados Unidos. La búsqueda de mejores oportunidades es una tarea diaria y cada vez son más los profesionistas que comparten su aprendizaje en el país, en sus comunidades y alrededor del mundo.