Expertos exigen a Cofepris alerta contra publicidad "criminal" de vapeadores

Juan Zinser, presidente del Consejo Mexicano contra el Tabaquismo y oncólogo del INCAN, acusó que los vapeadores son "pistolas cargadas con balas".

Los vapeadores tienen tres compuestos que pueden causar cáncer.
Blanca Valadez
Ciudad de México /

El Consejo Mexicano contra el Tabaquismo y organizaciones civiles exigieron a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y al Poder Ejecutivo emitir una alerta urgente contra la comercialización y publicidad "criminal" de vapeadores y de sus diversos dispositivos.

Los solicitantes advirtieron que en breve se desatará una cadena de enfermedades, incluso, de muertes de jóvenes como la ocurrida el 29 de octubre, en San Luis Potosí, causada por una neumonía grave y atípica asociada con el uso del vapeo.

Luego de que el Instituto Nacional de Referencia Epidemiológica y los laboratorios de San Luis Potosí confirmaran la primera muerte de un vapeador sano de 18 años, especialistas y organizaciones sociales exigieron a Cofepris la acción inmediata contra el uso de este tipo de productos aun cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) haya concedido a cuatro usuarios un amparo.

Juan Zinser, presidente del CMT y oncólogo del Instituto Nacional de Cancerología (INCAN), explicó que existe la idea errónea, promovida por la industria tabacalera, de que estos vapeadores y dispositivos electrónicos son una alternativa para dejar de fumar, cuando en realidad son “pistolas cargadas con balas” que propician, en un corto plazo, una inflamación anormal en los pulmones sin que haya de base un agente infeccioso o bacteriano que la desencadene, ni enfermedad alguna previa justificante.

En México hay mil 320 puntos de venta, más todo el mercado negro en internet. Según encuestas hay 975 mil vapeadores, pero cifras de esa industria, de ProVapeo, habla de 10 millones de usuarios en el país sin detallar que las lesiones que propician en el pulmón son similares a la explosión de una palomita de maíz quemada.

Lo grave, abundó, es que el daño que causa el vapear o el uso de los cigarros electrónicos es aún mayor en el corto plazo frente a los que de por sí ocasiona el tabaquismo con el tiempo.

“Se afecta la manera en la que el pulmón va a eliminar ciertas toxinas, como su sistema inmunológico será más eficiente, cómo va a poder oxigenar la sangre. Todo esto se daña por efecto de estos compuestos químicos que maltratan, lesionan, dañan el pulmón como si hubiese una infección severa pero resulta que ésta en realidad no existe y los lleva a la muerte”, añadió el oncólogo del INCAN.

Los vapeadores y cigarros electrónicos contienen hasta cuatro veces las concentraciones de nicotina frente a lo que contiene un cigarro convencional, el cual, por sí mismo ya es nocivo, pero además, inhala mayor número de veces, esto le produce edema pulmonar.

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