La gran asamblea de damnificados pidió a la presidencia municipal de Tula que se reponga el colchón a todos los afectados sin condiciones, después de que el gobierno local informara que la mueblería involucrada en el caso canjeará los dañados que sean presentados por uno nuevo.
En días recientes la agrupación Unidos por Tula dio a conocer que damnificados tras la inundación de septiembre de 2021 habían detectado que algunos de los colchones que les había entregado la alcaldía estaban en malas condiciones, además de ser insalubres debido a que eran reconstruidos.
Con el paso de los días más damnificados revisaron sus colchones e iniciaron una serie de protestas durante las cuales despedazaron los colchones y les prendieron fuego.
De hecho, la agrupación Unidos por Tula incluso anunció que analizaban las acciones legales a implementar tras el caso, y para ello pretendían acercarse ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), la Comisión para la Prevención de Riesgos Sanitarios de Hidalgo (Copriseh) y la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), para que en el ámbito de sus facultades atendieran las denuncias.
Por su parte la empresa AVM, que a petición de la presidencia municipal proporcionó los recursos para adquirir 100 colchones que donaría la presidencia, anunció tras el caso que iniciaría las acciones legales para obtener el reembolso por los colchones en mal estado e indicó que apoyaría directamente a las familias, sin intervención del gobierno de Manuel Hernández Badillo.
Después, el ayuntamiento informó que tras un acuerdo con la empresa Expomuebles San Lorenzo, todo colchón entregado en donación, que presentara un desperfecto, sería canjeado por uno nuevo este miércoles en el auditorio municipal, proceso que será vigilado por la contraloría municipal, el area de adquisiciones y la Profeco.