La Dirección general de Gobierno de las regiones Cuautitlán Izcalli y Tlalnepantla publicó el decreto de expropiación de ocho predios aledaños al cerro de Chiquihuite, con el argumento de rehabilitar o demoler edificios que representen un riesgo para los ciudadanos. Cabe recordar que el 10 de septiembre hubo un derrumbe que sepultó a una familia completa y provocó el desalojo de varias más.
En el decreto se explica que la dependencia tuvo a bien la expropiación de estos terrenos ubicados en la Calle Club de Exploradores de Chimalhuacán y Calle Alacranes Segunda Sección, de la Colonia Lázaro Cárdenas, en Tlalnepantla. Cabe señalar que todos ellos comparten en el documento 250 metros cuadrados de superficie, siete dueños distintos y que todos están en las inmediaciones del cerro.
El pasado 11 de septiembre un derrumbe en el cerro provocó afectaciones en múltiples domicilios, lo que generó la movilización de miembros de las coordinaciones General de Protección Civil; Nacional de Protección Civil (CNPC) y el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), además de organismos estatales y municipales.
Con este contexto es que el gobierno consideró de utilidad pública los terrenos, al basarse en la fracción XIX del artículo 3, de la Ley de Expropiación para la entidad mexiquense, que considera de utilidad “La rehabilitación o demolición de edificaciones que representen un riesgo para los ciudadanos”.
Este dicho estuvo respaldado con la presentación de dos dictámenes en los que se valoraron las condiciones de peligro y riesgo prevalentes en el sitio por el deslizamiento y flujo rocoso del propio cerro.
El primero de los dictámenes fue elaborado por la Delegación Regional Valle de México Poniente del Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de México, A.C.; mientras que el segundo fue por parte de la dirección general del Cenapred, en el que coincidieron que era necesario expropiar los lotes.
Siguen trabajos de apuntalamiento
La coordinación de Protección Civil estatal confirmó que hay un avance de 85 por ciento en el apuntalamiento de la zona del cerro de Chiquihuite. Las autoridades estiman que en dos semanas los ciudadanos puedan regresar a sus casas, siempre y cuando los especialistas consideren que es seguro.
A casi dos meses del desastre, calculan que 39 familias tendrán que ser reubicadas por la peligrosidad de permanecer en la zona.
MMCF