Familiares de un interno de nombre Andrés, quien falleció el pasado 12 de julio luego de su traslado del penal de Tenango de Doria al de Pachuca, se manifestaron en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de la capital hidalguense para exigir justicia pues aseguran que murió luego de ser torturado por custodios.
“Mi hijo me lo dijo a mí muchas veces y yo no le creí, que lo querían matar, la directora (del penal de Tenango) era la que se prestaba a eso, se llama Zenaida, ya llevaba tres meses que los custodios le pegaban allá, la directora recibía de mi hijo cuatro mil pesos cada mes para que tuviera beneficios como un celular y dos mil a un custodio”, sostuvo el padre del interno fallecido, Andrés Ruiz Susano.
Señaló que iniciaron una carpeta de investigación en la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) sin embargo, acusó que no han tenido respuesta.
“Presentaba muchos golpes mi hijo, lo torturaron, le quebraron cuatro costillas y una de esas le perforó el corazón, iniciamos la denuncia pero no han hecho nada”, aseveró.
Andrés se encontraba privado de su libertad en el Centro de Reinserción Social de Tenango de Doria por el delito de asalto en la carretera Pachuca-Ciudad Sahagún, fue sentenciado a siete años de prisión. Llevaba en el penal cuatro años 11 meses.
El 12 de julio Andrés fue trasladado de Penal de Tenango de Doria al de Pachuca, de acuerdo con su madre se lo habían llevado desnudo, que fue golpeado en el trayecto por los custodios, que al llegar a Pachuca estaba mal físicamente, lo llevaron al Hospital General y ahí falleció y que el resultado de la necropsia arrojó que había muerto por los golpes.
“Nadie autorizó el traslado, solo ellos”, acusó su padre, “no hay ninguna prueba de que hayan avisado a algún familiar o algo”, al tiempo de afirmar que ni la directora del Penal de Tenango de Doria ni el de Pachuca han dado la cara para explicar qué fue lo que sucedió.
Insistió que el Ministerio Público no ha querido hacer nada luego de denunciar la muerte de su hijo, “ni la Comisión de Derechos Humanos ni nada, iniciamos una queja”.
El señor Andrés exigió justicia por la muerte de su hijo, que dé la cara el director del Centro de Reinserción Social de Pachuca, de nombre Marcos, y diga quiénes fueron los que lo golpearon hasta causarle la muerte.
“Las personas que están privadas de su libertad son reos, vienen a cumplir una condena más no vienen a que los maten a golpes”, sostuvo uno de los familiares durante la manifestación.
Los familiares de Andrés portaban pancartas con las leyendas: “custodios matan a golpes a Andrés Ruiz”, “que respondan los directores corruptos, justicia para Andrés”, “custodios golpean, torturan a Andrés hasta matarlo”, y “basta de impunidad, que paguen los responsables”.