La farmacia “El Consuelo”, ubicada en Santiago Tianguistenco, tiene una amplia tradición en la región, este 2022 cumple 101 años dando este servicio como un negocio familiar, que guarda como herencia el buen trato y docenas de recetas de aquellos medicamentos antiguos.
Sucesor de la tradición de las boticas y droguerías, Ricardo García Cumplido es uno de los actuales responsables de este establecimiento que se ha ganado la confianza de cientos de familias, permitiéndoles sobrevivir por tantos años, a pesar de la intensa competencia de grandes cadenas.
“Mi bisabuelo manejaba la medicina antigua, incluso usaba algunas hierbas, plantas medicinales y algunos remedios caseros. Mi abuelo que fue militar, con la experiencia y conociendo un poco más de medicina y herbolaria, continuó con esta tradición”, comentó Ricardo.
De ser rebotica, pasó a ser botica y con el impulso de su abuelo, Gustavo García Pérez, y de su padre, Luis Gustavo García, comenzó con su transformación en botica y después en farmacia y perfumería.
“Mi abuelo y mi papá todavía manejaron eso de hacer productos a la antigua, con medidas en balanza de miligramos, gotas, supositorios, todo eso lo realizaban como se hacía en las reboticas o boticas. Mi papá se dedicó ya como médico general a atender en forma la farmacia y como consultorio”, explicó García.
El Agua de Espanto
Desde gotas para cólicos o para curar la diarrea hasta su famosa “Agua de Espanto”, este establecimiento aún guarda esa tradición, que confluye con los nuevos conceptos sobre farmacéutica, medicamentos y demás insumos para la salud.
Una de las preparaciones que más sorprende es justo el “Agua de Espanto”, receta que fue escrita por su bisabuelo y que se usaba para curar de espanto a chicos y grandes, además para aliviar golpes o raspaduras.
“Obviamente ya es muy poca la demanda, también por los requerimientos de salubridad, pero todavía tenemos la tradición de hacer ciertos medicamentos antiguos, el Agua de Espanto la seguimos haciendo obviamente, tenemos las medidas exactas y todo de parte de mi bisabuelo y mi abuelo, tenemos ahí los apuntes de cómo se preparan muchos medicamentos”, detalló el encargado.
“Todavía contamos con muestras antiguas, productos antiguos, cajas de medicamentos, medidas, envases, jeringas de vidrio, desinfectadores para las jeringas, las agujas de metal antiguas”, explicó García.
Tradición y modernidad
Aún se conservan algunos utensilios de esta profesión, guardando ese olor tan característico, pues a pesar de las incursiones de la industria, los recuerdos hacen de este lugar un espacio único.
“Es un gusto seguir con esto y una responsabilidad porque al final no es cualquier cosa, es algo del sector salud y hay que ser responsables en esto, de atender a las personas como se debe, conforme a la ley, todo lo que nos pide la Secretaría de Salud o Cofepris en este caso”, comentó el boticario.
Ricardo afirmó que lo que los distingue es el trato con sus clientes, pues incluso llegan desde Ocuilan, Malinalco, Tenango del Valle, Tenancingo, Xalatlaco, Capulhuac, Lerma, Ocoyoacac o Almoloya del Río, haciendo que esta tradición sobreviva.
Hasta famosos llegaron Finalmente, Ricardo recordó una de las anécdotas que lo han marcado, pues cuando era niño, en una época en donde los circos hacían varias paradas en este municipio, entró a la farmacia el famoso Profesor Jirafales, acompañado por Doña Florinda, regalándole así una de las mejores experiencias de su vida.
“Esa es una de la historias que siempre voy a contar, de que tuve la oportunidad de atenderlos, y que fueron clientes de la farmacia”. finalizó Ricardo.
Esta farmacia se encuentra en la calle Morelos 103, en Santiago Tianguistenco, con un horario de 9:00 a 21:00 horas de lunes a sábado.
BAFG