La fe guadalupana entre grupos de pandilleros es poderosa. En la colonia Chapalita, uno de los barrios más bravos de León, casi en cada esquina hay una Virgen Morena pintada en las paredes; los chicos banda se encargan de darles mantenimiento y las señoras las arreglan con flores y veladoras. Dicen, que a casi todos les ha salvado más de una vez la vida cuando se enfrentaban contra otras bandas, o bien, los sacó de las drogas.
Saúl Hernández es integrante de una banda de la colonia Chapalita. Nació en la calle Venezuela y a sus 36 años sigue ahí, incluso ya tiene una familia que se formó en el mismo barrio y recuerda que la celebración a la virgen cada 12 de diciembre es una tradición inculcada desde sus tías y su abuelita hace unos 60 años, pero la fe se reforzó desde que intentaron matarlo.
“Me pasó el accidente hace unos 5 años, entonces ya no quiere uno recordar, hay que vivir la vida diferente, más tranquilo, es taba aquí a la vuelta y me dieron un cuchillazo en el cuello, ya estaba muy grave en el hospital, 10 días en coma, daban pocas esperanzas y uno está con la fe hacia laVirgen de Guadalupe”, comentó.
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La celebración a la Virgen Morena en la esquina de las calles Yucatán y Canadá donde está la imagen que pintaron los Calave ras 18 comienza con Las Mañanitas, las señoras se acomodan para tenerle todo en orden, después hacen una carne asada y si el ambiente se prende sacan sus mejores pasos para un baile en la calle.
La virgen ha sido milagrosa con la mayor parte de los integrantes de la banda y es una forma que ellos tienen para agradecerle, pues no sólo les ha salvado la vida de los enfrentamientos callejeros, sino también, los ha sacado de las drogas como al padrino Cande, quien desde hace 10 años está “limpio” gracias a ella, e incluso, tiene un centro de rehabilitación donde salva a jóvenes del consumo de sustancias tóxicas.
“Alguna vez anduve todo desmadrado en el vicio perdido y siempre me anduvo cuidando y guiando, de una y miles, ahorita bendito sea Dios tengo 10 años limpio, sin drogas, sin alcohol, precisamente tengo un centro de rehabilitación, ayudamos a la banda a que se alivianen, a que dejen de sufrir”, comentó Cande.
Juan Ernesto Solano alías El Pitos ocupó un lugar privilegiado, pues pintó a la virgen también como parte de su agradecimiento, pues la vida de él no ha cambiado mucho comparada a la de sus compañeros, también ha luchado por salir del mundo de las adicciones, incluso, se ha apoyado en el centro de rehabilitación Espíritu Santo, que está en el bulevar Zodiaco en la colonia los Limones, donde Cande es el padrino.
“Pintar a la Virgen es más que nada para agarrarme de Dios y de la Virgen para sacarme de los vicios que ahí voy poco a poco y más que nada poner algo de mi parte y más que nada aquí el padrinazo que me dio fuerza y voluntad para saber cómo trabajar mi cerebro y gracias a él aquí estoy”, comentó.
En esta ocasión entre todos lograron reunir casi 5 mil pesos para celebrar a la virgen como se merece y ya tiene todo preparado para conmemorarla como cada año. _