Omar Darío De Lassé Cañas, subsecretario de la Secretaría de Gobernación (Segob) y Carlos Benítez Urióstegui, director en la misma dependencia, recorrieron las obras que realiza en el río Tula la empresa contratada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Durante la visita de los funcionarios los miembros de la Gran Asamblea de Damnificados les mostraron diversos tramos del río Tula para que el funcionario conociera a detalle la ruta del caudal en el que el Valle de México vierte sus desechos sin mayor tratamiento, a fin de que esas observaciones se integren a las mesas de trabajo que llevan a cabo la organización social y la Segob.
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Les explicaron el procedimiento que realiza actualmente la Conagua tienen como objeto revestir el río, algo que, consideraron, no solucionaría la problemática del manejo de los residuos pues se requiere rehabilitar los vasos reguladores y tratar el agua pero en el Valle de México.
A los funcionarios les dijeron que entre otras irregularidades, en las obras no se tiene el debido cuidado con el manejo y traslado de los lodos contaminantes que se extraen del río, y por ese motivo la Gran Asamblea ya interpuso una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), para que se investigue ese aspecto.
Además de ello le recordaron que hay campesinos que desean usar el agua residual del Valle de México para reimpulsar zonas agrícolas como la de San Agustín Tlaxiaca, cuyos productores ya han realizado la petición formal desde el sexenio de Enrique Peña Nieto y ahora con el presidente Andrés Manuel López Obrador, sin que en ninguno de los dos casos se les haya tomado en cuenta.
Demanda agrícola
Explicaron los representantes de la Gran Asamblea que se puede desarrollar infraestructura para abastecer la demanda agrícola, con lo que se podría solucionar la problemática del manejo de los excedentes de agua residual y esto representaría la solución de dos problemas: la falta de agua de riego para cultivos y el manejo de los excedentes del Valle de México.
Les expresaron que el aumento de agua además de riesgos de Protección Civil, representa un foco de contaminación, pues el aroma de las mismas es putrefacto, causando diversos malestares entre quienes respiran ese aroma presente a toda hora.
Reiteraron su llamado a la Segob para que interceda ante la Conagua para que se revise el tema y se tomen en consideración las propuestas ciudadanas presentadas, las cuales tienen el respaldo de especialistas, pues dijeron que la región no puede ser la región no puede ser la letrina Del Valle de México, por lo que dicha área debe hacerse responsable de sus desechos y no enviarlos a Tula, como ocurrió en septiembre pasado.