De cara al regreso de las actividades habituales de algunos sectores económicos en el país, el gobierno federal incluyó la prohibición de vello facial y accesorios en el espacio de trabajo. Esto como una de las medidas estipuladas en su documento “Lineamientos Técnicos de Seguridad Sanitaria en el Entorno Laboral”.
Sin embargo, el estado de Guanajuato presentó la “Guía para la Reincorporación a los Centros de Trabajo ante el COVID-19”, documento que excluye dicho punto. El director general de protección contra riesgos sanitarios del estado, Luis Carlos Zúñiga Durán explicó para Milenio que hasta el momento no consideran al bello facial como un factor de riesgo.
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“No estamos ahorita solicitando que todo el mundo se quita barba y bigote, no lo tenemos documento, lo estaremos revisando y si en su momento se comprueba la posibilidad de riesgo, con eso habría que rasurarlo o afeitarlo. Pero hasta ahorita la información que tenemos, no está considerado como un factor de riesgo”, señaló.
En cuanto al uso de joyería, señaló que será una recomendación importante, debido a que son superficies donde podría permanecer el virus. Destacó sobre todo que habrá que tener cuidado con los espacios donde se prepara la comida, para evitar que el contacto de las manos con los alimentos pueda generar contagios.
“Lo estamos recomendando desde hace tiempo sobre todo en la preparación de alimentos, en los lugares como las cocinas o comedores de estas empresas, evitar anillos, pulseras, aretes, uñas largas, etc.”, declaró.
Aunado a esto, recalcó que es muy importante evitar mezclar agua con jabón con cloro, y en su lugar utilizarlos por separado, ya que una cosa es la limpieza y la otra la desinfección. Juntarlos inactiva el efecto que se busca para eliminar los virus.
Ambos documentos señalan protocolos indispensables con medidas similares para evitar la propagación del virus, así como un rebrote, ahora en los espacios de trabajo. Esto con base principalmente en la capacitación y responsabilidad de los trabajadores, que a su vez será vigilado por las autoridades sanitarias.
Como los puntos más relevantes de estas guías, se encuentra la identificación de los puestos de trabajo y actividades prioritarias, pues habrá que procurar mantener el trabajo en casa en la medida de lo posible. De igual forma alterar los turnos de trabajo con el objetivo de evitar la aglomeración de personas.
De suma importancia será que los trabajadores sigan las medidas de prevención y limpieza, como la sana distancia (separa estaciones de trabajo entre 1.50 y 2.0 metros, además de evitar reuniones), el lavado constante de manos, etc. Habrá que colocar dentro de estos espacios señaléticas y carteles informativos del tema.
En cuanto al ingreso y egreso de trabajadores y clientes, deberá existir un filtro donde se tome la temperatura, y se detecten síntomas. Se colocarán despachadores de gel antibacterial con un 70% de alcohol, se habilitarán zonas de entrega y recepción de mercancías, además de contar con depósitos especiales para productos desechables y de uso personal.
Trabajadores atenderían esta medida
En un sondeo realizado por Milenio a trabajadores que tienen barba o bigote, manifestaron que, si en Guanajuato se llega a considerar dicha medida como parte de un protocolo sanitario, estarían dispuestos a seguirla con el fin de resguardar la salud propia y de quienes los rodean:
“Pues sí no te dejan trabajar, pues sí me lo quitaría. Ahora sí que es cuestión del gobierno, y pues ahora sí que del punto de vista de cada quien. Si es un requisito para el trabajo pues habrá que hacerlo”.
“Yo pienso que pues es libertad ¿no? Nosotros decidimos si queremos traer bigote o barba o si la verdad no. Digamos para vista del trabajo a la mejor sí sería quitármela, pero para andar en calle o paseando la verdad no”.
Incluso quienes acostumbran a utilizar accesorios, se muestran dispuestos a colaborar: “Toda precaución que se pueda tomar, sería buena. De hecho, yo me enteré y me quité el anillo de casado, el reloj... entre más evitemos el contagio sería mucho mejor”.