Habitante de Aramberri señala daños en la comunidad La Chona tras tormenta 'Alberto'

A pesar de las adversidades, la vida continúa en La Chona, una comunidad donde se siembra mucho ajo.

Don Trino Guzmán compartió su experiencia luego del paso de la tormenta tropical Alberto. Roberto Alanís
Roberto Alanís
Aramberri, Nuevo León /

En la pequeña comunidad de La Chona, en Aramberri, vive el señor Trino Guzmán, un hombre curtido por el tiempo y que recientemente sufrió la furia de la tormenta tropical Alberto.

El agua no solo inundó los alrededores, sino que también arrancó el techo de la casa donde don Trino habita con su esposa.

Al rememorar tormentas pasadas, revivió lo ocurrido hace más de tres décadas con el paso del huracán Gilberto.

“No había habido otro, nada más el Gilberto y éste (refiriéndose a Alberto). Bastante agua, nada más que ahí se hace uno fuerte, pues llega en la noche. Se sienta ahí, se cobija uno, si tiene, con hule, y si no, con la cobijita, y ahí. Está canijo”, relató Trino, mostrando la resiliencia que caracteriza a quienes viven zonas propensas a desastres naturales.

Mirando a su alrededor, señaló los daños: “Si volaron las láminas de ahí, y aquellas de allí, ahí había láminas también”. El estruendo del agua y el viento era ensordecedor. “El agua y el aire, fuertes los dos, no hay ni a cuál irle, el agua y el viento, y todavía quiere seguir, mire cómo está”, comentó, volviendo a señalar el paisaje azotado por la tormenta.

A pesar de las adversidades, la vida continúa en La Chona, una comunidad donde se siembra mucho ajo, actividad que es el sustento para muchas personas como don Trino, que pese a su avanzada edad, sigue trabajando.

“Me voy a la chamba, ahí en el ajo. Me voy a ahí a jalar un rato, un día, dos días, una semana”.

Don Trino y su esposa enfrentan, al igual que otros pobladores, momentos difíciles. La ayuda aún no ha llegado a su comunidad y se espera que hasta el domingo arribe el apoyo de las autoridades.

Además, la única forma de llegar a la cabecera de Aramberri en busca de víveres es rodeando, ya que se formó una laguna en el camino habitual, incrementando el viaje a 86 kilómetros y duplicando el tiempo del trayecto.


LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.