El domingo por la mañana, un grupo de ciudadanos de San Agustín Tlaxiaca tomó la iniciativa de reparar un tramo de la carretera federal México-Laredo, a la altura de la comunidad de El Durazno.
Lo anterior, luego de esperar la intervención de las autoridades federales y estatales, por lo que los vecinos decidieron actuar por su cuenta para mejorar las condiciones de la vialidad, que se ha convertido en un peligro para los automovilistas debido a su avanzado deterioro.
Con sus propios recursos, los residentes llevaron a cabo labores de bacheo en el asfalto dañado. Para advertir a los conductores, colocaron una manta que decía: "Despacio, el pueblo está trabajando por salvar tu vida. Agradece con un claxon", mensaje que fue bien recibido por los automovilistas, quienes mostraron su apoyo al pasar por el lugar.
La policía municipal y estatal se sumó a la iniciativa, brindando apoyo para dirigir el tráfico y evitar accidentes durante las labores.
Curiosamente, horas antes de esta intervención, el nuevo gobierno municipal había solicitado a los habitantes reportar los baches más peligrosos de sus barrios o comunidades para tomar medidas inmediatas.