Federico Barraza es un hombre de 66 años originario de Saltillo, Coahuila que estuvo varado en situación de calle por casi dos meses en el puerto de Mazatlán, a donde acudió por una oferta de trabajo engañosa que no resultó ser lo que le habían contado.
Sin manera de contactar a su familia, se vio en la necesidad de pedir permiso para refugiarse por las noches en una gasolinera de la Zona Dorada, mientras que por el día acudía a las letras de la ciudad, a la espera de que alguien conocido lo reconociera y le ayudara a regresar a casa.
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Mujer de Torreón lo boletinó en sus redes sociales
A pesar de que llegó a Mazatlán el pasado 17 de diciembre, no logró encontrar trabajo y fue hasta el 5 de febrero que logró solicitar apoyo a una mujer originaria de Torreón, la cual lo vio y se interesó en su situación, por lo que lo boletinó a través de sus redes sociales, donde proporcionó el nombre de su hijo, con la esperanza de que su familia viera el mensaje.
La noble mujer de nombre Valeria, además solicitó a la ciudadanía que lo ayudara con comida, ropa o agua, o bien, con un apoyo económico para su pasaje de regreso a la capital de Coahuila, ya que todas las tardes a partir de las 16:00 horas se le podía encontrar en el monumento al lado de las letras de Mazatlán.
Al día siguiente logró contactar a su familia
La convocatoria tuvo tal impacto que fue compartida miles de veces a través de Facebook y para el día siguiente logró contactar a su familia, además que gran número de personas empezaron a aportar para que lograra regresar a casa, por si fuera poco, la misma mujer acudió en su búsqueda darle la noticia, así como cortarle el cabello y la barba.
Es así como después de vivir en las calles por 51 días, en tan sólo dos días y con la ayuda de las redes sociales, este miércoles pudo reencontrarse con su familia en Saltillo, siento una muestra más de lo que se puede lograr con el apoyo y voluntad ciudadana.
GERR