El desazolve y ampliación del río Tula en dos etapas, un protocolo de operación conjunta para temporada de lluvias para el Valle de México e Hidalgo, la operación de estaciones de medición automática en la cuenca del río Tula, así como la rectificación y revestimiento del río Tula son acciones contempladas en el plan hídrico para Tula de Allende que implementará la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría de Marina (Semar).
En el documento se informa que en la etapa de desazolve y ampliación del río Tula, que estará a cargo de la Semar y la cual se realizará del kilómetro 20+600 al 26+200, contempla despalme y retiro de árboles ubicados en el cauce, desazolve del cauce y depósito de material en la parte posterior de los bordos en esos mismos 5 mil 600 metros lineales de obra, para que el caudal tenga una capacidad de transporte de 677 metros cúbicos por segundo.
La segunda etapa, que estará a cargo de la Semar y Conagua, contempla un tramo de 3 mil 900 metros, del kilómetro 16+750 al 20+650, en el que se desazolvará el cauce, con el acarreo de material de excavación.
En ésta se retirará el puente “viejo” de Las Tres Culturas, modificación de sección hidráulica y rectificación 100 metros aguas arriba y aguas abajo en los puentes Metlac, Ocampo y Zaragoza, así como la conformación de bordos en el margen izquierdo del cauce en un tramo de mil 60 metros, trabajos que permitirán transporte de 400 metros cúbicos por segundo.
Drenaje profundo
La rectificación a la altura del puente Zaragoza identifica 10 árboles y tres edificaciones; mientras que la construcción de un bordo en la margen izquierda, en un tramo de mil 60 metros, identifica en el punto 15 edificaciones y 30 árboles.
En materia del protocolo de operación para la temporada de lluvias prevén actualización, toda vez que únicamente contempla el portal de salida del sistema de drenaje profundo; es decir no incluye a la presa Requena ni los ríos Tlautla y Rosas ni la presa Endhó, los cuales, a partir del plan hídrico, serán adheridos junto con las presas mexiquenses Danxhó y Taxhimay, a la par de que se realizará una revisión de lluvia generalizada y también para lluvias concentradas en distintas zonas del Valle.
Las nuevas reglas del protocolo 2022 incorporarán el anexo 4, que incluye la Zona del río Tula, en la que se toman en cuenta las condiciones del río Tula, río Tlautla, río Rosas, así como la regulación de la presa Requena, y el protocolo además permitirá analizar la necesidad de ampliar la capacidad de regulación en el Valle de México.
Este protocolo deberá actualizarse continuamente, según se incorpore nueva infraestructura, protocolo en el que se buscará la participación de Hidalgo, pues hasta ahora solo va la Conagua, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México y la Comisión de Aguas del Estado de México.
El plan también estipula una red de 20 estaciones de mediación automática en la cuenca del río Tula para monitorear en tiempo real las variables meteorológicas e hidrométricas. Mientras que el último paso rectificación y revestimiento se desarrollará por Conagua y Semar, en un tramo de 3 mil 900 metros lineales, desde el kilómetro 16+750 al 20+650.