Derribar las Villas Panamericanas no significa una garantía a la conservación y cuidado del medio ambiente del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG), así lo advirtió el propio secretario de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial del Gobierno del Estado de Jalisco, Sergio Graf Montero.
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“Yo no tengo ninguna prueba, que el hecho de demolerlas mejora la condición. Yo no estoy hablando de qué uso se le da (a las Villas), pero el hecho de demolerlas, no tengo ninguna muestra que pueda ser una mejora en la cuestión ambiental”, expresó textualmente quien fuera académico e investigador de la Universidad de Guadalajara.
Graf Montero calificó como “terrible” que se piense en gastar millones de pesos en destruir el inmueble cuando ese dinero se podría invertir en otros rubros.
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“Las Villas están establecidas al igual que toda una serie de infraestructura en la zona El Bajío, y no tendrían por qué tratársele diferente, ya que se aprobaron en un mismo tiempo”, remató el responsable del Medio Ambiente en la entidad.
Durante el Foro Universitario sobre la Protección de El Bajío y el Futuro de las Villas Panamericanas que realizó el ITESO, no se despejo la incertidumbre que prevalece en el sentido de si permanecerán o qué uso se le daría al inmueble construido con motivo de los Juegos Panamericanos del 2011. Además, se reveló que no hay un estudio sobre la cantidad de agua subterránea que existe en esa zona.
Los investigadores solo coincidieron en la necesidad de conservar el espacio natural. “La Primavera es la mejor decisión que la sociedad y gobierno puede tomar ahora razonadamente y con argumentos” expuso, Alejando Mendo Gutiérrez, catedrático del Departamento del Hábitat y Desarrollo Urbano del ITESO, quien se pronunció porque las autoridades no tomen decisiones en lo “obscurito” con respecto a este tema.
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“No podemos darnos el lujo de que en lo obscurito o en la altas cúpulas se tomen las decisiones que afecten a millones de habitantes de una región metropolitana”, destacó el investigador.
Mientras, Patricia Martínez Barba, coordinadora de Gestión de Territorio del Gobierno de Jalisco, reconoció que el decreto de zona de recuperación ambiental para la protección del Bajío que lanzó el mandatario jalisciense hace ocho días, se puede impugnar. Dijo –además- que no requiere que “pase” por el Congreso del Estado.
En tanto, el alcalde de Zapopan, Pablo Lemus Navarro, anunció que a más tardar el próximo 15 de noviembre, el municipio tendrá concluido los Planes Parciales de Desarrollo Urbano y el Plan de Ordenamiento Ecológico.
“Estarán alineados al Decreto” que hace ocho días anunció el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, subrayó.
Lemus Navarro, reiteró que no entregará el permiso de habitabilidad para que las Villas Panamericanas sean utilizadas como vivienda. “No venimos a negociar”, advirtió poco antes de que arrancara el encuentro.
Sostuvo que entregarlo representaría un daño ecológico irreversible y además, “se generaría derechos a terceros”.
Durante el encuentro, el representante de 400 copropietarios con o sin construcción en la zona de El Bajío, Luis Nieto, reprochó a las autoridades estatales que no hayan sido consultados con respecto al decreto de la Zona de Recuperación ambiental para la protección del Bajío.
“La disposición legal que se tomó (en cuenta) es el decreto de Recuperación Ambiental no establece la obligatoriedad de la autoridad de establecer un proceso de consulta”, respondió y argumentó el titular de la SEMADET.
Sin embargo, se dijo dispuesto a trabajar con ellos en los proyectos futuros y adelantó que todas las urbanizaciones que están el Bajío tendrán que tener plantas de tratamiento. Hoy en día, la mayoría cuenta con fosas sépticas. Es decir, no estas conectados al drenaje.
De ahí que independientemente del uso que tengan, las Villas Panamericanas tendrán que contar con plantas de tratamiento de aguas residuales, además de una de repuesto.
Es decir, “hay alguna planta de tratamiento tendría que haber dos más para asegurar que en función del volumen de agua que se va a generar haya un aseguramiento de que si una falla, la otra pueda estar operando sin problema”, explicó Graf Montero.
Adelantó que se tendrá que trabajar con los propietarios de edificaciones en la zona de El Bajío para que transiten a nuevos sistemas que no pongan en riesgo la contaminación de los acuíferos.
El estadio de Chivas, por ejemplo, tiene que tener un uso eficiente del agua en cada una de sus infraestructuras, principalmente en el área de estacionamiento.
Durante sus intervenciones las autoridades insistieron mucho sobre otros desarrollos que existen en el Bajío. ¿Quién se quejó del estadio en su momento?, dijo el titular de SEMADET.
CC