Las industrias dedicadas al deslavado de ropa de mezclilla, deben modernizarse para eficientar el uso de agua y evitar que haya un mayor gasto que afecten los mantos acuíferos en Tehuacán, dijo el vicepresidente de Canacintra en esta ciudad, Juan Manuel Pérez Navarro.
El adquirir maquinaria de última tecnología que reduce el uso de agua, representa un costo altamente elevado, sin embargo, es necesario que se tenga equipo apropiado que evite el uso excesivo del vital líquido, de acuerdo a investigaciones que han hecho, con los nuevos equipos que hay en el mercado, se puede tener un ahorro de hasta el 80 por ciento en el consumo de agua, sin embargo de acuerdo al último estudio que se hizo, la inversión que se tendría que aplicar para la renovación de la maquinaria en las industrias locales establecidas es de aproximadamente unos 80 millones de pesos al valor actual, el monto que es alto y no se puede cubrir fácilmente.
En una empresa de lavandería se requiere de entre 25 y 30 litros de agua por cada una de las prendas que se lavan.
Además se debe tomar en cuenta que muchas de las compañías no realizan el tratamiento de sus aguas residuales, tampoco están regularizadas.
Como lavanderías debidamente establecidas tienen que contar con los permisos de manejo de residuos sólidos para el relleno sanitario, descargas de aguas residuales, de uso de suelo y otros más que se deben de tramitar ante las dependencias reguladoras.
En la región hay diferentes empresas que trabajan de manera clandestina como son algunas ubicadas en Santiago Miahuatlán, la junta auxiliar Francisco I Madero y Pino Suárez, pertentes a Tepanco de López, San Diego Chalma perteneciente Tehuacán y otras más que se encuentran trabajando de manera irregular, sobre los cuales es importante que tomaran conciencia e iniciaran el proceso de regularización, aclaró que no están en contra de esa industria, sino que se busca trabajen apegados a la legalidad, porque son generadores de empleo y eso ayuda a la gente que requiere del ingreso económico.
En toda la región estima que no son más de 20 empresas las que cumplen con todas las especificaciones apegadas a la ley, pero no se tiene un indicador o estimado de cuántas clandestinas existen; sobre todo saben que muchas de ellas generan una competencia desleal, porque ofrecen precios más bajos y eso afecta a quienes cumplen con los distintos requisitos.
Estiman que cuesta unos 100 mil pesos anuales mantener en regla los diferentes permisos, así como el mantenimiento a la maquinaria que también es objeto de revisiones por parte de la autoridad como Conagua, la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, por ese motivo los costos que ellos manejan no pueden competir con los que tienen compañías que no están dentro de la legalidad.
AFM