Con el primer Festival de la Chalupa en la Plaza Independencia de Pachuca, las personas que se dedican a la venta de este antojito hidalguense reconocen que la inflación en el país aumentó de precios la canasta básica, lo que los orilla a elevar sus precios, o en su caso restar ingredientes en su preparación para mantener un costo accesible a los comensales.
El denominado platillo típico patrimonio de la ciudad, alcanza este 2024 hasta los cinco pesos por pieza, siendo comúnmente elaborado por orden de cinco en un precio promedio de los 20 a lo 25 pesos.
Normalmente la chalupa es elaborada a base de tortilla de maíz, la cual tiene un costo de hasta 25 pesos el kilogramo; papa, que puede tener un costo de hasta 20 pesos por kilogramo; pollo, siendo el ingrediente más costoso, pues incluso un kilogramo de pechuga de pollo asciende a más de 90 pesos el kilogramo; lechuga, por cerca de 10 pesos la pieza; y salsa verde, misma que engloba una cantidad de ingredientes como chiles, cebolla y ajos, con costos de hasta 10 pesos el kilogramo de cada uno de ellos.
Sin embargo, en algunos establecimientos de antojitos mexicanos, o cenadurías, el precio de una chalupa oscila actualmente entre los dos y cinco pesos, en algunos puntos deciden mantener un precio de dos pesos, en la compra de cinco piezas para cobrar un monto de 10 pesos; en otros más el precio asciende debido a que colocan más ingredientes en cada pieza, pero el común denominador es la modificación de sus menús, reflejando pequeñas etiquetas con nuevos precios, reflejo de la inflación.
De acuerdo al Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), durante el mes de junio, la inflación general se aceleró nuevamente ubicándose en el 4.93 por ciento, siendo la mayor en los últimos 12 meses; estas cifras reflejan que los servicios generales, como los restauranteros, se ubicaron en 5.15 por ciento de incremento en sus precios, la más alta desde marzo de 2022, mientras que los alimentos de la canasta básica se situaron en 4.22 por ciento, lo cual afectó el precio de las chalupas, entre otros productos y servicios.
Aunque las personas que se dedican a la elaboración y venta de este antojito pachuqueño prefirieron mantenerse anónimas, sí reconocieron el alza en los precios, “cada día todo está más caro, y para mantener un precio bajo y que se vendan más chalupas, a veces lo que hacemos es poner más ingredientes como papa, y menos pollo, así nos sale un poco mejor la venta”.
Pese a esto, hay lugares en los que prefieren elevar el precio de venta, pasando en algunos meses de dos pesos a cuatro pesos la pieza, ya que con ello ofertan un producto de mayor calidad y que les permite a los comensales un mayor sentido de saciedad; además de que con ello se mantienen dentro de las fuentes de trabajo, sobre todo aquellas personas que se mantienen en la informalidad.
Cabe recordar que el denominado comercio informal es una de las principales fuentes de trabajo de las personas que no cuentan con acceso a un puesto dentro de una empresa o establecimiento que se ubica dentro de la “formalidad”, es decir que reporta impuestos al Servicio de Administración Tributaria (SAT) y que otorga a sus empleados servicios de seguridad sociales, como es el acceso a la salud; así como prestaciones de Ley, tan sólo en Hidalgo la tasa de Informalidad Laboral asciende al 71.8 por ciento de la población ocupada, de acuerdo a cifras del Inegi; y al ser un antojito fácil de elaborar muchas personas deciden desarrollar esta actividad para obtener un ingreso.
Ya sea dentro de tianguis, puestos ambulantes y semifijos en las diferentes demarcaciones de la entidad son una muestra de este tipo de actividad, pues parecen más frecuentes en las calles y avenidas de las ciudades; de acuerdo a la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), el estado se ubicó en tercer lugar nacional en informalidad laboral, con el 71.8 por ciento.
El documento, enuncia que en Hidalgo se tiene una población ocupada de un millón 441 mil personas, es decir que poco más de un millón de personas se ubican dentro de la informalidad laboral; mientras que la población desocupada asciende a sólo 26 mil 736 personas, esto dentro de la población de personas de 15 años o más; en tanto, la ciudad de Pachuca refleja una población ocupada de 217 mil 121 personas; desocupada de cinco mil 876 personas, y dentro de la población ocupada el 51.5 por ciento está dentro de la informalidad laboral, es decir 111 mil 817 personas en esta actividad.