Universidades de Altamira como empresarios del sur de Tamaulipas se unieron al Pacto Mundial de las Naciones Unidas, entrando a la Alianza 20-21.
Se hizo la presentación en el IEST-Anáhuac, quien se integra al programa que forma parte de la Agenda 2030, así como la Universidad Politécnica, con la meta de mejorar la calidad de vida de las personas, enfocado en combatir la pobreza, el medio ambiente, los derechos humanos y la corrupción.
En la presentación de los objetivos, Michelle Benítez, representante del Pacto, agradeció la labor de la comunidad local, agregando la colaboración de 400 profesores y alumnos de las mencionadas instituciones educativas, trabajando en comunidades cercanas y presentando un censo efectuado a mil 500 personas.
Las aportaciones se darán a las familias de cuatros colonias de la zona, Luis Donaldo Colosio, Ampliación Luis Donaldo Colosio, Acapulquito y Huatulquito, las cuales se recorrieron en cuatro semanas, encontrando que tres de cuatro de sus habitantes sufre de carencias en servicios, alimentación, agua, luz, entre otros.
“Estamos contentos que esta iniciativa esté arrancando en Tampico, donde las universidades, los empresarios y la sociedad civil juntan sus esfuerzos para cumplir con las metas y objetivos que desde Naciones Unidas nos hemos trazado”, dijo al representante del organismo.
El acto lo atestiguaron Gloria Laura Septién, rectora del IEST-Anáhuac, así como su homólogo de la Politécnica de Altamira, Gustavo Hernández Martínez, agregando a directivos de los corporativos locales, empresas locales y foráneas, incluyendo petroleras y asociaciones civiles.
Los catedráticos Rafael Estrada y Jorge Pérez Cruz organizaron junto a maestros y jóvenes estudiantes las visitas a familias de los sectores antes mencionados de Tampico y Altamira. Basados en información del Coneval, recopilaron la información. En datos reales, tres de cuatro habitantes tienen una carencia mulltidimensional, asunto en lo que se comprometieron a trabajar para ayudar.
ELGH