Desde hace año y medio Gustavo de 34 años de edad padecía de reflujo gastrointestinal, el cual era tratado con medicamentos de fácil acceso, pero fue hace dos meses cuando su enfermedad se comenzó a complicar, pues a raíz de haberse contagiado de covid-19, su esófago se cerró de manera definitiva, lo que le impide ingerir cualquier tipo de alimento, él y su esposa solicitan ayuda de la ciudadanía para poder realizar las cirugías que necesita para llevar una vida normal.
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"Entonces por consecuencia ya no le baja el alimento nada más le llega hasta aquí y se le regresa en el momento que está comiendo, tanto bebiendo líquido como sólido y todo lo vomita, su estómago no recibe nada ya con esta semana son casi 22 días y yo lo tengo que tener hidratado con el suero porque si no pues se me deshidrata y él se siente mal porque su estómago ya no está recibiendo comida", detalló Herminia Margarita Ocampo, esposa de Gustavo.
Herminia y Gustavo en mes y medio han visitado infinidad de médicos especialistas, quienes lo diagnosticaron con acalasia aguda severa; padecimiento es un trastorno poco frecuente que dificulta el paso de alimentos y líquidos desde el esófago, que conecta la boca con el estómago, hacia el estómago.
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Para poder revertirse, Gustavo necesita realizarse dos cirugías de dilatación esofágica, cuyo costo oscila entre los 24 mil pesos cada una.
"El doctor me dice que para que él no es candidato a una cirugía de corte de estómago porque él está ahorita muy desnutrido, él ha perdido más de 20 kilos, era un hombre que pesaba casi 100 kg y ahorita pesa 72 kg, entonces el doctor me dio una opción de hacerle una dilatación esofágica con balón es una operación ambulatoria dura de tres a cuatro horas y me dijo que metiéndole ese varoncito ya le abre el estómago y ya empieza a creerle líquido"
El desgaste físico y psicológico no sólo ha sido para Gustavo, sino también para su esposa, quien ha dejado también de comer para no hacer sufrir a su pareja de vida.
"Él no come nada de comida, no le cae nada de líquido y por lo consiguiente a mí tampoco me da hambre porque yo siento feo comer o que él me ve a comer y él llora porque tiene mucha hambre, se me ha derrumbado se me ha caído de lo débil que están sus piernas y yo siento muy feo, yo no duermo, duermo solo una o dos horas en toda la noche y todo el día estoy aquí con él porque con su propio reflujo se me ahoga", explicó la mujer.
Sí usted desea ayudar a Gustavo a recaudar los 45 mil pesos para poder realizar la operación que le salvaría la vida, puede realizar su donativo a la cuenta bancaria BBVA 4152 3137 8309 9158 o pueden comunicarse con su esposa Herminia Margarita al 33 20 20 71 82.
MC