Ante los últimos hechos violentos que se han registrado en Jalisco y sus fronteras con los estados de Colima, Zacatecas, Michoacán y Aguascalientes, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reforzó su presencia en la entidad con 500 elementos más para realizar diversas operaciones en conjunto con autoridades estatales y municipales
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A través de la Comandancia de la XV Zona Militar, se incorporaron los efectivos a los 3 mil 300 elementos militares y de la Guardia Nacional que ya están en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) y pertenecen a la Fuerza de Tarea Conjunta México que tiene las características de gran movilidad y potencia, pero sobre todo la capacidad de ser desplegada de manera rápida a una o varias partes del territorio nacional por tierra o aire.
Su misión principal es el fortalecimiento del Estado de Derecho y el desarrollo de las actividades cotidianas de la sociedad, actuando en todo momento con pleno respeto a los derechos humanos.
Con estas acciones, el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional refrendan su compromiso de velar y salvaguardar el bienestar de los ciudadanos, contribuyendo con el Gobierno del Estado de Jalisco y sus municipios.
La semana pasada se reportaron al menos 14 muertos, 32 detenido, bloqueos y vehículos incendiados en Michoacán, Colina y Jalisco, zonas de operación del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y en las que se han desplegado oficiales de corporaciones federales.
El viernes pasado se confirmó el hallazgo del cuerpo de René Cervantes, asesor del alcalde de Aguililla, Michoacán, César Valencia, asesinado un día antes. En Colima, ocurrieron cuatro asesinatos, con lo que se registran 12 ejecuciones en tres días en la zona conurbada del estado y Villa de Álvarez, así como dos heridos, la localización de restos humanos embolsados y una casa habitación incendiada.
En San Juan Nuevo Parangaricutiro, después de la balacera que el jueves dejó cinco muertos y 32 detenidos, la Secretaría de Educación estatal suspendió clases el viernes. En Sarabia, Zacatecas, grupos delictivos convierten hogares abandonados por la violencia en cuarteles de combate.
La madrugada del viernes, en Tamazula de Gordiano, Jalisco, se reportó el bloqueo de la carretera federal Jiquilpan-Manzanillo, a la altura del kilómetro 68, con dos camiones de carga incendiados. Inicialmente se tenía información sobre un enfrentamiento entre hombres armados y quema de vehículos a las afueras de la cabecera municipal, por lo que el ayuntamiento ordenó suspender clases y servicios públicos.
Horas antes, en Jocotepec, sujetos armados dispararon contra elementos municipales que presentaban auxilio en un accidente vial en la zona del Lago de Chapala; los policías perdieron la vida y dos bomberos resultaron lesionados. En Lagos de Moreno, en la región de Los Altos, cerca del estado de Guanajuato, se dio un tiroteo entre civiles armados y soldados que realizaban un patrullaje. Uno de los militares resultó herido sin consecuencias graves, y se presume la detención de dos de los atacantes.
Ese viernes, el gobernador jalisciense Enrique Alfaro Ramírez manifestó que la entidad está en calma y que los hechos respondían a problemas de seguridad en los estados de Michoacán, Zacatecas y Colima, por lo que “no pueden hacernos caer en el miedo y la zozobra”. Informó que se reforzó la seguridad en los tres municipios y la vigilancia en las zonas limítrofes del estado.
MC