Luego del ataque sufrido por el párroco Alberto Ruiz Pérez y las religiosas que colaboran en El Refugio Casa del Migrante, el pasado 30 de octubre, a manos de un grupo armado, el sacerdote señaló que han tenido que reforzar las medidas de seguridad tanto en la parroquia como en el albergue.
- Te recomendamos Que la Fiscalía decida si dará o no la protección al sacerdote Policía
“Yo siempre protegí el albergue con medidas de cámaras de seguridad, nunca me había sentido desprotegido, tengo 16 años e incluso muchas veces salía a las dos o tres de la madrugada que me hablaban para ir con un enfermo al hospital y sin problema solo me iba, pero ahora que pasó esto, tenemos que tomar otras medidas y ya estamos poniendo las cámaras y estamos cerrando con rejas todos los espacios abiertos, y obviamente que ya no voy a atender servicios en la noche y menos si no conozco a las personas”, señaló el religioso.
La seguridad en la zona y en la colonia Cerro del Cuatro se ha visto reforzada, aseguró Ruiz Pérez.
“Después de este acontecimiento y dado que se hizo la denuncia, hubo una respuesta y solicitamos medidas cautelares, y lo manifestamos a nivel nacional hasta lo que es gobernación. Siguen pasando las patrullas, están viniendo constantemente, hay una cierta seguridad en el sentido de la percepción, no solamente mía sino de la comunidad en general”.
El responsable de la parroquia “Nuestra Señora del Refugio” informó que ya ratificó la denuncia que presentó en la Fiscalía del Estado de Jalisco por el robo que cometieron seis sujetos armados que ingresaron a la casa parroquial, pero hasta la fecha no se ha tenido ningún avance en la investigación.
JMH