Vestir como elemento de seguridad pública sin serlo, en Jalisco es fácil

los lugares autorizados para la venta de productos como las placas de identificación, chalecos, y uniformes se están a la vista como en tianguis famosos del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) como el Baratillo o el Cultural.

Frecuentemente gente que no pertenecen al sector de seguridad busca adquirir placas y uniformes.
María Ramírez
Guadalajara /

Vestir como un elemento de seguridad pública en Jalisco aun sin serlo, es cada vez es más fácil, los lugares autorizados para la venta de productos como las placas de identificación, chalecos, y uniformes se están a la vista como en tianguis famosos del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) como el Baratillo o el Cultural.

“Si me he dado cuenta que más tiendas pequeñas se están dedicando a vender este tipo de artículos los cuales no tienen los filtros que tenemos los locales bien establecidos o empresas cómo está si se han incrementado en varios puntos de la Zona Metropolitana”, dijo el propietario de un negocio autorizado.

Los dueños y trabajadores de las tiendas que se dedican a la venta de este tipo de productos, comentan que frecuentemente acuden gente que no pertenecen al sector de seguridad interesados en adquirir placas y uniformes.

“Se nota, uno se da cuenta por qué te dicen cuánto cuesta eso, y un policía se dice me puede mostrar esa placa o en la fe o el sector entonces uno se da cuenta cuando realmente son o no, Seguido vienen pero como ya tenemos toda la vida aquí, ya conoce uno quien es realmente policía y no a cualquiera le vendemos porque el oficial todo lo que vendemos aquí”, detalló María Álvarez.

También comentaron que para atender a los elementos de seguridad es indispensable mostrar su identificación vigente, además de que los policías deben de acudir a las tiendas ubicadas en el municipio donde prestan servicio.

“Si hemos tenido visitas de personas que claramente se ve que los fines son delictivos y la respuesta es simple, si no traen identificación no pueden ingresar”, dijo Carlos Martínez Acuña.

Los establecimientos que se encuentran regulados deben de contar con permiso por parte del municipio y en algunas ocasiones dependiendo de los productos que vendan regulados por la Secretaría de la Defensa Nacional y otros por la Comisión Nacional de Seguridad Pública.

Sin embargo, la falta de regulación e inspección, ocasiona que la venta clandestina y el acceso a estos productos sean fáciles para las personas que se dedican a delinquir.

“He visto videos de los que salen en las redes sociales de los criminales los cuales van bien equipados y yo ubico esos productos y son productos de por la zona ubicó incluso casi casi las marcas de sus productos y de qué repercute cómo es posible que grupos delictivos tengan mejor equipo que las policías”, explicó el comerciante.

Los precios tanto de las placas como uniformes o de los diversos productos no tienen precios accesibles, por lo que otra de las razones por las que existe la venta clandestina es que los costos bajan. Aproximadamente vestir a un policía cuesta entre 4 a 3 mil pesos.

MC

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